"Hay cierta opinión generalizada de que algo hay que hacer (...) Tenemos que tomar medidas que sean racionales y tengan sentido", ha asegurado la presidenta del regulador, que ha evitado pronunciarse sobre medidas concretas. No obstante, ha asegurado que cualquier medida que limite el precio del gas a nivel únicamente local "no tendrá la finalidad buscada", ya que podría desplazar la oferta de gas a otros países. Fernández ha defendido el funcionamiento del mercado marginalista y considera que, una vez se terminen las turbulencias que están afectando a los precios, como la guerra de Ucrania, "sería bueno volver al funcionamiento de este mercado". Durante su intervención, Fernández ha asegurado que hay muchas medidas que circulan en el ámbito europeo y ha asegurado que las subastas de energía a largo plazo podrían quitar "volatilidad" del mercado y bajar los precios.
La presidenta de la CNMC ha justificado su postura previa a favor de mantener el mercado marginalista ante la previsión de que los precios energéticos iban a bajar el pasado verano, algo que no se ha producido por varios sucesos extraordinarios como el conflicto ucraniano o el cierre del gaseoducto de Argelia que pasaba por Marruecos.
"La realidad es que hay un montón de elementos que ahora producen una turbulencia de mercado (...) que no parece que se vayan a recuperar a corto plazo", ha subrayado sobre el cambio del contexto. En este sentido, ha emplazado también al estudio que presentará a la Comisión Europea la Agencia de Cooperación de los Reguladores de la Energía (ACER) en abril.
Cani Fernández también ha asegurado que el regulador hace un "seguimiento muy de cerca" de las energéticas y el cumplimiento con las medidas tomadas.