Los datos más recientes sobre el precio medio de la electricidad en España muestran una bajada significativa de más del 58 % respecto al de hace un año, y un 26,5 % más barato que en enero. Es decir, el precio medio de la electricidad en los primeros quince días de febrero se ha situado en los 54,48 euros por megavatio hora (€/MWh). Esto también supone que los costes energéticos para las empresas han descendido tras dos años al alza, pero siguen altos y todavía no alcanzan para devolver a la pequeña y mediana empresa a los niveles previos a 2021, según la última edición del Indicador Cepyme sobre la Situación de las Pymes Españolas. El informe señala que los precios industriales medios de los productos energéticos (electricidad, gas y agua) son un 45,5 % más altos que hace dos años y un 75,5 % mayores que la media de los precios de 2019.
Para Sergio Maynar, director de la comercializadora Neoelectra Energía, "estas cifras demuestran, sobre todo, la volatilidad de los precios que provoca incertidumbre y condiciona mucho la planificación y las inversiones de la industria y el comercio. Una adecuada gestión energética de las pymes, que incluye la elección de la tarifa más ajustada a las necesidades de la empresa y la situación del mercado, es fundamental para que la energía no sea un problema para las empresas, sino una herramienta de competitividad". Y es que la demanda de energía de las pymes supone un 41 % del consumo energético nacional, a la vez que son las responsables del 50 % de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Precio de la electricidad
El pasado mes de octubre, España registraba la mayor caída del precio de la luz de toda la Unión Europea. Un cambio en el precio de la luz en España desde 2022, con cifras máximas históricas (más de 200 euros) hasta la actualidad, con cifras mínimas también históricas (cero euros). Además, el 20 de octubre de 2023 se produjo un nuevo máximo diario de participación renovable en España. El 70,5% de la energía eléctrica que se produjo en nuestro país fue renovable, la mayor cuota registrada hasta el momento, gracias principalmente la eólica, que produjo por sí sola el 53,8% de la electricidad.