El Banco de España acaba de publicar un informe sobre la "traslación del aumento de los costes de producción a los precios de venta" que revela que las compañías eléctricas que operan en el mercado nacional han aumentado sus precios de venta casi un 90% entre 2021 y 2022. El informe sostiene que ese incremento (el del precio de venta) es mucho mayor que la subida de costes que el sector energético ha registrado en ese bienio (+57%), es decir, que las eléctricas (Iberdrola, Endesa, Naturgy y compañía) habrían aprovechado la subida de sus costes (derivada de la guerra de Ucrania) para aumentar sus márgenes de beneficio de manera extraordinaria. Ningún otro sector de los estudiados por el Banco de España presenta guarismos de semejante entidad, ni siquiera las petroleras (sector del Refino), que también han incrementado de manera extraordinaria su margen de beneficio en este marco de guerra. Según el Banco de España, Repsol y compañía han visto cómo sus costes de producción han crecido cincuenta puntos entre 2021 y 2022 (+50%), pero han enjugado esa subida con un incremento de sus precios mucho mayor: +67%. El Refino se queda así lejos de las eléctricas, que lideran la carrera por los márgenes de beneficio (+89%), pero las petroleras también se posicionan muy muy por delante (+67) de los demás sectores económicos estudiados por el Banco de España: Transporte y almacenamiento, Industria química, Hostelería y restauración, etcétera, etc.
Y si no, véase
Los sectores de (1) Comercio mayorista, (2) Construcción y actividad inmobiliaria, (3) Hostelería y restauración y (4) Transporte y almacenamiento también han incrementado sus precios de venta más de lo que han crecido sus costes de producción, pero ni mucho menos lo han hecho tanto como eléctricas y petroleras. En los cuatro casos (véanse esos cuatro sectores sobre la diagonal del gráfico), el precio ha crecido efectivamente más que el coste de producción, pero ciertamente que muy poco más (de ahí su proximidad a la diagonal). El sector de la Construcción y actividad inmobiliaria, por ejemplo, ha visto crecer sus costes en torno a siete puntos, como se aprecia en el gráfico, pero ha incrementado sus precios prácticamente lo mismo, en torno a ocho puntos (+8%).
Al otro lado de la diagonal estarían los sectores que han subido sus precios menos de lo que han crecido sus costes. Entre ellos destacan los sectores de (1) la Agricultura y ganadería, (2) la Primera transformación de metales, (3) la Industria química y (4) Alimentación y textil (véanse esos cuatro sectores bajo la diagonal).
En estos cuatro casos, los costes de producción suben, pero en estos cuatro casos la subida de precio que aplican las empresas a sus productos y/o servicios es menor que el incremento en sus costes de producción. En Agricultura y ganadería, por ejemplo, suben los precios casi 25 puntos, pero suben más de un 25% (tal y como se aprecia en el gráfico) los costes de producción que afrontan los agricultores y ganaderos. Es decir, que, mientras que agricultores y ganaderos no repercuten toda la subida de costes en sus productos, las compañías eléctricas y las petroleras no solo sí lo hacen (sí repercuten toda esa subida) sino que, además, lo hacen de manera absolutamente desproporcionada, aumentando así extraordinariamente sus márgenes de beneficio.
Hasta aquí hemos estado hablando de la Variación de los precios de venta en relación con la de los costes de producción unitarios entre 2021 y 2022 (la guerra estalló en febrero del 22), lo que se podría resumir grosso modo en un titular: sube el coste de producción de las eléctricas 57 puntos; sube el precio de venta de la electricidad 89. Pero si la comparación la hacemos con el período prepandemia (2019), los números se disparan aún más: prácticamente +160% en el caso del precio de la energía eléctrica; +80% en el caso del refino. Y esos incrementos tampoco quedan justificados con el incremento en los costes de producción. Porque ese segundo incremento (el de los costes de producción) sigue siendo muy inferior a esos guarismos: +110 en el caso de la electricidad; +50 en el caso del refino, tal y como se aprecia en el gráfico.
La conclusión es inequívoca
La pandemia y la guerra han disparado los costes de producción en muchísimos sectores. Pero no todos han reaccionado de igual modo. "Los resultados indican -explica el Banco de España en su informe- que, en la mayoría de los principales sectores económicos, se habría producido una traslación [coste-precio] muy elevada, prácticamente completa (en términos absolutos), tanto en el período corto (respecto a 2021) como en comparación con la situación existente en 2019".
Pero hay algunos sectores que, además de trasladar la subida de sus costes de producción a sus precios, han decidido aprovechar la coyuntura para incrementar sus márgenes de beneficio.
¿Cómo? Aumentando sus precios de venta mucho más que lo que han aumentado sus costes de producción.
Y ahí el paradigma lo fija el sector energético: +89%; +67%. Ese aumento brutal del precio de venta afecta además, de manera muy especial, a otros sectores: los sectores intensivos en el uso de la energía, como el químico o el de la transformación de metales, sectores que sin embargo no han incrementado desproporcionadamente sus precios, como sí han hecho petroleras y eléctricas. Es decir, que el sector energético no solo está estrangulando la economía doméstica, sino también la industrial y de muchas empresas.
En conclusión, y dicho en román paladino: eléctricas y petroleras han aprovechado la crisis (o las crisis) para presionar aún más el bolsillo de los consumidores e incrementar, aún más, sus márgenes de beneficio.
Gabinete de Estudios Económicos
Un informe, también publicado este verano, que viene a corroborar ese disparo de los beneficios de las compañías energéticas es el que firma el Gabinete de Estudios Económicos del sindicato Comisiones Obreras (CCOO). En ese estudio, Comisiones analiza los datos que ofrece el Observatorio de Márgenes Empresariales (Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital), datos de la Agencia Estatal de la Administración Tributaria y datos del mismo Banco de España.
La conclusión principal del estudio de CCOO es grosso modo la misma: el sector de las energéticas ha incrementado sus beneficios como ningún otro. "El aumento de los márgenes no se ha producido con igual intensidad en todos los sectores. El sector energético -dice literalmente Comisiones- ha sido el que más ha disparado sus márgenes".
El discurso que esgrime CCOO en su estudio sintoniza en cierta medida con el del Banco de España: las empresas -dice el sindicato- han aumentado el importe de sus ventas más que sus costes, "trasladando hacia fuera, al resto de la sociedad, el choque inflacionista iniciado en el sector energético".
CCOO resume su estudio en un titular escalofriante: el sector energético (producción, distribución y venta de electricidad, gas y derivados del petróleo) ha casi cuadruplicado su margen empresarial en solo cuatro años.
Tres ideas y tres imágenes
El estudio de Comisiones Obreras concreta que (1) el sector energético ha obtenido en los últimos 12 meses un margen de 97.805 millones de euros, un 262% más que el margen que obtuvieron en 2019; (2) el margen total sobre ventas se dispara del 12,1% en 2019 al 22,1% en los últimos 12 meses, "en un contexto -añade CCOO- en el que además las ventas del sector se han doblado"; y (3) las empresas energéticas también ganan hacia adentro y amplían su margen a costa de los salarios. "Así, el margen empresarial sobre el valor añadido -especifica Comisiones- pasa del 86,8% en 2019 al 95,6% en los últimos 12 meses". ¿Conclusión? Comparado con 2019 -cuantifica el informe-, el margen empresarial en el sector energético "ha crecido 25 veces más que los salarios".
Otro dato que contextualiza
Según el estudio de Comisiones, los márgenes de las empresas no energéticas han crecido en España en 31.608 millones de euros desde 2019, pero es que los de las energéticas se han incrementado en el país en el mismo lapso en... 100.000 millones de euros (más de cien mil, para ser más precisos: 101.394).
Comisiones incluye en su estudio tres gráficos que lo dicen todo. El primero "muestra claramente -explican los autores del informe- cómo la subida de los precios, que empezó con el gas y la electricidad en el tercer trimestre de 2021, combinada con el carácter oligopólico de los mercados energéticos y con el mal diseño regulatorio de algunos de ellos, ha permitido a las empresas casi cuadruplicar sus márgenes" (desde los 27.000 millones de euros del cuarto trimestre de 2019 hasta los casi 98.000 del primer trimestre de este curso).
El segundo gráfico muestra "cómo en 2021, cuando hubo un cuello de botella a nivel internacional con la capacidad de refino, el incremento de los márgenes de refino fue sustancial y contribuyó con ello a la inflación de nuestro país". Posteriormente -continúan los autores del informe-, el margen empresarial en el comercio mayorista de combustibles subió "de manera acelerada" e hizo que los márgenes de refino cayesen, "pero en realidad las empresas que controlan ambos segmentos del negocio en nuestro país -alertan los autores- son las mismas, así que las petroleras han ganado cada vez más en todo momento".
La otra cara de la moneda serían las gasolineras, que, en muchos casos, no son propiedad de las petroleras sino franquicias, y que no han podido incrementar sus márgenes empresariales -sostiene Comisiones- como lo han hecho las empresas del resto de la cadena de valor, que están mucho más concentradas.
Por fin, el tercer gráfico "confirma -apuntan los autores del informe- lo que ya sabíamos sobre el comportamiento de las energéticas en esta crisis: las energéticas aprovecharon la subida de precios de las materias primas para incrementar sus márgenes con fuerza y ahora que los precios de las materias primas están bajando están manteniendo márgenes".
Así, Comisiones sostiene que "estas empresas se han lucrado a costa de la sociedad de manera desmesurada y eso justifica plenamente -avanza- gravar fiscalmente esos beneficios extraordinarios, pero también nos recuerda que debemos reformar la formación de precios en mercados como el eléctrico o el gasístico para devolver los márgenes de estas empresas de manera estructural a niveles asumibles para la sociedad".
Conclusión
Las eléctricas, las gasísticas, las petroleras están aprovechando -concluye el informe- el poder de mercado del que disponen en mayor o menor medida en sus respectivos sectores "para no sólo trasladar las subidas de costes que afrontan, sino para subir sus márgenes a costa de la sociedad". Así, las familias "están pagando con una mayor inflación -continúa Comisiones- la subida de los márgenes empresariales en estos sectores, pero, a la vez, las empresas están ganando también hacia adentro porque se están quedando con un porcentaje cada vez mayor del valor añadido generado".
Y un apunte para acabar. O cuatro. Cuatro apuntes (contables) sobre las cuatro compañías energéticas más importantes de entre las que operan en España. Endesa ha declarado en este primer semestre del año (enero-junio) 879 millones de euros de beneficio neto. Naturgy, 1.045 millones de euros (+87,6% con respecto al beneficio neto registrado en el mismo período del año anterior). Repsol, 1.420 millones de euros en el mismo lapso, los seis primeros meses de 2023. Iberdrola, 2.521 millones de euros.
Más información
• La traslación del aumento de los costes de producción a los precios de venta de las empresas no financieras en 2022 (Banco de España)
• Las empresas están obteniendo márgenes históricos a costa de la sociedad (inflación) y de sus trabajadores (reparto del valor añadido). Gabinete de Estudios Económicos de la Confederación Sindical de Comisiones Obreras