La determinación de Polonia de continuar brindando asistencia financiera a las centrales eléctricas de carbón más allá de 2030 ha hundido el intento de reformar el mercado eléctrico de Europa, dijeron los negociadores al término del encuentro.
La sesión se prolongó entre las 18:30h del miércoles 5 de diciembre y las 6:30h del 6, pero los participantes en la reunión no lograron llegar a un acuerdo sobre la propuesta de reforma del mercado eléctrico de la UE, incluida en el "paquete de energía limpia", por la postura del país anfitrión de la Cumbre del Clima.
"Después de 12 horas de negociación, el Consejo siguió defendiendo los subsidios al carbón hasta 2035. Esto es simplemente inaceptable", declaró a euractiv.com Florent Marcellesi, eurodiputado de Equo y miembro de los Verdes, que formó parte de la delegación del Parlamento Europeo en las conversaciones.
La Comisión Europea ha propuesto poner un límite de emisión de CO2 a las centrales de 550 g de CO2 por kilovatio / hora, un umbral que descarta de facto las ayudas estatales para las centrales eléctricas de carbón. Pero Polonia depende casi un 80% del carbón para generar electricidad, y quiere seguir apoyándolo a través de los llamados "mecanismos de capacidad", que los países implementaron para remunerar a determinadas centrales eléctricas por asegurar el suministro en casos excepcionales, como puntas extremas de demanda.
"Todo el mundo está de acuerdo en el límite de 550 g, pero no en las fechas de entrada en vigor", puntualizó Marcellesi al respecto. El tripartito ha programado una nueva reunión el 18 de diciembre, a fin de tratar de conseguir ese difícil acuerdo.
Este fracaso en las conversaciones de la UE supone, sin duda, una llamada de advertencia para las naciones del mundo reunidas en la cumbre del clima de la ONU que se está celebrando en Katowice y en la que se deben tomar decisiones de profundo calado para lograr que la temperatura del planeta se contenga dentro de unos límites "asumibles".