La OMS ha presentado la petición en el marco de la Segunda Conferencia Mundial sobre Salud y Clima organizada con el Gobierno francés en París los días 7 y 8 de julio. De acuerdo con la entidad, las muertes asociadas al cambio climático están provocadas por el cólera, la amplia distribución geográfica del dengue y fenómenos meteorológicos extremos, como olas de calor e inundaciones. A ello hay que sumar las casi siete millones de muertes anuales por enfermedades relacionadas con la contaminación atmosférica: cáncer de pulmón y accidentes cardiovasculares.
La OMS estima que para 2030 la cifra de muertes asociadas al cambio climático –por malaria, enfermedades diarreicas, la desnutrición o el aumento de las temperaturas– ronde las 250.000. Los niños mayores y los enfermos crónicos serán los más afectados. Del mismo modo, las áreas con infraestructura sanitaria deficientes –sobre todo en los países en desarrollo– serán las menos capaces de hacer frente a las crisis sanitarias que podría producirse.
"Los fenómenos meteorológicos extremos son cada vez más intensas y frecuentes", señala la organización sanitaria en su página web, que recuerda que estos cambios afectarán en un futuro a la posibilidad de disponer de aire limpio, agua potable, alimentos suficientes y refugios seguros.
También tienen un elevado coste económico. La OMS calcula que el coste de los daños directos para la salud (es decir, excluyendo los costes en los sectores determinantes para la salud, como la agricultura y el agua y el saneamiento) se sitúa entre 2.000 y 4000 millones de dólares de aquí a 2030.
Ante esta situación, los más de 300 representantes gubernamentales de distintos países, profesionales y expertos en cambio climático que se reunieron en París analizaron la necesidad de que los sistemas sanitarios promuevan servicios y tecnologías de bajo consumo para reducir el impacto ambiental, una cadena de producción de alimentos más sostenible y la alimentación saludable.
La OMS adelantó en la conferencia que va a crear un equipo específico que desarrolle un nuevo enfoque sobre la evaluación de la economía de la salud y el cambio climático.