El primer encuentro nacional del Pacto de las Alcaldías que organiza la Diputació de València, en colaboración con la Oficina del Pacto de los Alcaldes de Bruselas, cuenta ya con más de 200 ayuntamientos, diputaciones, federaciones de municipios y entes públicos medioambientales inscritos. El Pacto de las Alcaldías es el mayor movimiento mundial de ciudades que, de manera voluntaria, han asumido el compromiso para actuar contra el cambio climático. Los municipios firmantes se comprometen a alcanzar, e incluso superar, los objetivos de la Unión Europea en materia de clima y energía. El encuentro acogerá mañana en el Palau de les Arts a algunos de los asistentes ya confirmados: ayuntamientos de ciudades como València, Zaragoza, Pamplona, Murcia y Alicante; diputaciones como las de Málaga, Jaén y Tarragona, así como el cabildo de Santa Cruz de Tenerife; entidades medioambientales de Madrid, Bilbao, Gijón y A Coruña; y una larga lista de consistorios de la provincia. Un total de 300 alcaldes y alcaldesas han sido invitados a participar en un acontecimiento que está dirigido, principalmente, a los responsables de las administraciones locales de toda España. Aquellos que no hayan cursado aún su inscripción para participar en esta jornada de lucha contra el cambio climático desde los municipios pueden hacerlo a través del enlace.
Maria Josep Amigó, vicepresidenta y responsable del área de Medio Ambiente de la Diputación: "el objetivo es dar a conocer los nuevos retos de neutralidad climática para el año 2050, la conexión entre el Pacto de las Alcaldías y el Green New Deal de la Comisión Europea, el nuevo presupuesto comunitario y la propuesta para incluir la pobreza energética en los planes municipales sobre el clima y la energía"
La Diputación de València, como coordinadora del pacto en la provincia, tiene como función hacer llegar la iniciativa a las autoridades locales para promover su adhesión, así como facilitar a los firmantes la asistencia técnica, económica, administrativa y política necesaria para alcanzar sus compromisos. Es relevante el incremento de alcaldías valencianas que se han sumado a esta iniciativa desde 2015, cuando había solamente 17 entidades locales inscritas, siendo en la actualidad un total de 242 municipios.
Durante la jornada, que contará con la presencia del presidente de la Diputació, Toni Gaspar, y la consellera de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, Mireia Mollá, la corporación provincial mostrará el trabajo conjunto llevado a cabo en los últimos años por las administraciones locales, a la hora de poner en práctica los planes municipales de acción climática. Se trata de un ejemplo de éxito ya que, con la coordinación de la Diputación, la valenciana es una de las comunidades que mayor crecimiento de municipios adheridos ha registrado en toda Europa. También en la ceremonia en el Palau de les Arts se realizará una firma simbólica de los nuevos objetivos del Pacto para 2050, mediante el cual los municipios y las provincias y regiones que quieran podrán mostrar el deseo de adherirse a los nuevos objetivos de neutralidad climática de la Unión Europea.
El Pacto de las Alcaldías cuenta actualmente con más de 7.000 autoridades locales y regionales de diferentes países que aprovechan los puntos fuertes de un movimiento que involucra a múltiples actores. "El ámbito de actuación -informa la Diputación- se ha abierto, incluso, al resto de continentes, ya que se trata de un problema global y los logros obtenidos demuestran que estos instrumentos funcionan". En este sentido, los fondos europeos irán cada vez más ligados a los objetivos de cambio climático, de ahí la importancia de un encuentro que servirá para intercambiar experiencias entre municipios de toda España.
Reducir las emisiones de CO₂
Las ciudades albergan una mayoría creciente de la población mundial y producen alrededor del 70% de las emisiones de dióxido de carbono. Según la Diputación de Valencia, los municipios tienen la "responsabilidad de actuar" sobre las fuentes de esas emisiones, en particular el transporte y el consumo de la energía, y "su implicación resulta imprescindible" para alcanzar determinados objetivos, "como la reducción de las emisiones de CO₂en un 40% antes de 2030, mejorar la eficiencia energética, utilizar fuentes de energía renovable en sus territorios y desarrollar medidas para adaptarse a las consecuencias del cambio climático".
