Entre las múltiples acciones llevadas a cabo para cumplir con los objetivos medioambientales, Schneider Electric también ha creado la nueva gama SMAir SeT de celdas de Media Tensión, con tecnología libre de gas SF6.
El SF6 (hexafluoruro de azufre) es un gas de efecto invernadero muy usado en el sector eléctrico. Se trata de un gas muy fiable y eficaz, pero con un gran impacto en el medio ambiente. Si tenemos en cuenta que en el mundo hay instalados más de 30 millones de unidades de aparamenta eléctrica de media tensión, que un interruptor-seccionador típico contiene de media 1 kg de gas SF6 y que ese kilo tiene el mismo impacto que 23.500 kg de CO2, es fácil entender la urgencia de encontrar soluciones alternativas más ecológicas.
La innovadora celda sostenible y digital de Schneider Electric combina el aire puro y la tecnología de corte en vacío, evitando el gas SF6 pero manteniendo sus ventajas. La gama ya ha sido reconocida por los expertos de la industria con la categoría de Industrial Efficiency Awards, “Energy Economy”, en la feria Hannover Messe 2020, y con el prestigioso premio iF Design Award.
Con esta tecnología es posible ahorrar 2,4 kg de SF6 en las subestaciones de media tensión que equivalen a 56,4 toneladas de CO2. Al eliminar gradualmente el potente gas de efecto invernadero SF6 de todos los productos para el año 2025, según sus últimos compromisos climáticos, Schneider Electric evitará el equivalente a unos 4 millones de toneladas de emisiones de CO2 al año.
El webcast contará con la intervención de expertos como Martina Tomé, vicepresidenta de Power Systems de Schneider Electric; Esther Izquierdo, presidenta del Clúster de la Energía; Roberto Villafáfila, coordinador programa PhD en Ingeniería Eléctrica en la UPC; y Luis Merino, codirector de Energías Renovables.
“En este encuentro digital queremos transmitir a todo el sector que ahora es posible acelerar la descarbonización con una tecnología sostenible y al mismo tiempo eficiente, que aprovecha todas las ventajas del IoT y de la digitalización para reducir las pérdidas de energía y las emisiones de CO2”, asegura Tomé.