Una noticia (una entradilla) en la que entran todas las claves del escenario energético nacional 2021. Una noticia en la que mandan las dos grandes batallas que tienen hoy lugar en esta España de transición: la batalla del autoconsumo, que sigue peleando contra trabas burocráticas, reglamentaciones obsoletas (que no acaban de ser desarticuladas) y retrasos normativos; y la batalla de los megaparques, que prometen pingües inversiones y mucho empleo en el corto plazo, pero que están suscitando recelos, crecientes, en muchos colectivos ecologistas, ciudadanos y rurales. Una noticia y dos alianzas: Aliente (Alianza Energía y Territorio) y la Alianza por el Autoconsumo. ¿Protagonista de la noticia? Sapiens Energía, que ha difundido hoy un comunicado en el que anuncia su adhesión a ambas iniciativas "para garantizar una transición sostenible a las energías renovables".
Juan Sacri, presidente de Sapiens Energía: "el desarrollo del autoconsumo energético requiere de la definición de una estrategia global y un marco regulatorio estable y que asegure su desarrollo sin barreras, pero, también, que garantice que se hace de forma ordenada, evitando impactos negativos para las personas y para su entorno. En línea con nuestra filosofía de trabajar sobre la base de la colaboración y las alianzas, nos unimos a Aliente y a Alianza por el Autoconsumo. Sumando fuerzas lograremos un nuevo modelo energético eficiente, sostenible y justo para todas las personas"
La Alianza por el Autoconsumo fue fundada por 40 organizaciones (ecologistas, sindicales, de consumidores, ciudadanas) en el mes de mayo de 2017, y desde entonces impulsa esta solución de ahorro -el autoconsumo- como “uno de los instrumentos más apropiados para luchar contra el cambio climático y reducir el impacto medioambiental de la generación eléctrica”. Menos impactos porque está claro que la generación renovable no emite gases de efecto invernadero; y porque está claro que toda la electricidad que generemos en el tejado de casa es electricidad que no habrá que traer, con líneas de alta tensión, desde ningún remoto rincón de nuestra geografía. Hoy, la Alianza por el Autoconsumo está integrada por más de 60 entidades comprometidas a desarrollar "campañas de concienciación ciudadana y de incidencia política" para impulsar el autoconsumo.
Por su parte, Alianza Energía y Territorio (Aliente) es un colectivo recientemente constituido con el objetivo de "proponer una transición energética justa, basada en la generación renovable distribuida, el ahorro energético y el autoconsumo; una transición que ponga la defensa del territorio y su biodiversidad en el centro". Aliente -explican desde Sapiens- surge como reacción a la proliferación "de proyectos de renovables a gran escala y con líneas de alta tensión, que han generado gran oposición por sus efectos dañinos sobre el paisaje y la biodiversidad". Y por eso, la nueva Alianza pide “a los Gobiernos central y autonómicos la puesta en marcha de una serie de medidas para garantizar la conservación de la biodiversidad durante el desarrollo de la transición energética a las renovables”.
La propuesta de Sapiens: autoconsumo solar colectivo de proximidad
La Comunidad de Energías Renovables (CER) Sapiens Energía presume de ser referente en el diseño, ejecución y gestión de comunidades energéticas locales (CEL) en España. Los miembros de las CEL -explican desde Sapiens- se convierten, al mismo tiempo, en "productores, gestores y usuarios de energía limpia y más económica", mediante "instalaciones de autoconsumo colectivo de proximidad de su propiedad", que, a su vez, generan impactos positivos en su entorno social y medioambiental.
En su primer año de actividad, Sapiens Energía ha promovido cinco proyectos de comunidades energéticas (en Alzira, Fontanars dels Alforins, Llíria y dos en Albalat dels Sorells) y participa en otros dos, promovidos por los Ayuntamientos de Valencia (en el barrio de Castellar-l’Oliveral) y Canet D’En Berenguer. A ellos se sumarán, en los próximos meses, otros desarrollos, actualmente en tramitación. "El modelo -explican- es aplicable tanto a nivel municipal, como en áreas residenciales y comunidades de vecinos y en zonas empresariales".
Sapiens describe su modus operandi
«En estos proyectos, el ámbito de cobertura de las instalaciones productoras de energía solar alcanza un radio de 500 metros alrededor de la cubierta (distancia establecida por la normativa vigente). La instalación fotovoltaica está dimensionada de manera que los excedentes sean mínimos y una parte de la energía se destinará a familias del municipio en situación de pobreza energética. Las placas solares tienen una vida útil de unos 25 años y permiten generar ahorros a aquellas familias que se sumen a la comunidad energética desde el primer día (con bajadas en facturas que se sitúan en torno al 30% de sus costes anuales). Además, se reducen las emisiones de CO2 y se dinamiza la actividad económica del municipio»
La España más mediterránea lidera
La Comunitat Valenciana ha apostado por ser líder en la implantación de esta fórmula de autoconsumo colectivo, con el Plan de Fomento de las Comunidades Energéticas Locales, diseñado por la Conselleria de Economía Sostenible, Sectores Productivos, Comercio y Trabajo, que tiene como objetivo que todos los municipios de la región (542) cuenten con, al menos, una comunidad energética en 2030. En esta línea están trabajando, también, la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica y la Conselleria de Vivienda y Arquitectura Bioclimática. El Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace) tiene abierta una línea de ayudas a instalaciones de autoconsumo de comunidades energéticas, con las que puede cubrirse hasta el 65% de la inversión a fondo perdido. La dotación total es de 2 millones de euros y pueden solicitarse hasta el 31 de mayo.
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