La Generalitat Valenciana ha anunciado un "plan de choque" para resolver las solicitudes de instalaciones "hasta que se agoten los fondos disponibles", ya que ha asegurado que hay más de 33.000 pendientes de placas solares y baterías en viviendas. Además de un refuerzo de personal para tramitar autorizaciones ambientales integradas. La consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, Salomé Pradas, ha asegurado que ya no habrá "diferencias de criterios" dentro la Conselleria y ha insistido en su objetivo de acometer un plan de simplificación de la burocracia administrativa, que contempla modificar la Ley de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje y reducir tiempos de resolución de expedientes, "siempre desde la sostenibilidad".
El Ejecutivo valenciano también revisará y modificará la ley autonómica de Cambio Climático porque, según la consellera, la actual tiene "mucha palabrería y poca aplicación" y genera incertidumbre, según informa Europa Press. También hará una modificación de la ley de Protección Animal "desde la sensatez", ya que ha defendido que la protección del medioambiente y de las especies es compatible con el desarrollo económico y con la llegada de inversiones: "Se ha acabado el prohibir por prohibir", ha dicho Pradas. Durante su discurso, Pradas (PP) ha cargado contra la gestión del anterior gobierno del Botànic en todas sus áreas, sobre todo contra su "ecologismo de salón", y ha hecho hincapié en que su prioridad será el desarrollo la Comunitat Valenciana.
La respuesta de la oposición
Durante el debate, PSPV y Compromís han puesto en duda la postura de Pradas frente al cambio climático, ya que han recordado que gobierna junto a Vox. La socialista Mª José Salvador, que fue responsable de Obras Públicas, ha exigido a Pradas que no haga una "mala copia" de las políticas del PP antes de 2015 y no "ponga en riesgo" los fondos europeos, además de reiterarle que abandone "la guerra del agua" con el trasvase y subrayar que el impulso del aeropuerto de Castellón fue según ella gracias al Botànic. Desde Compromís le han afeado que pacte con Vox "en los cuatro años más decisivos de emergencia climática".