Según informaciones periodísticas, el proceso cumplirá varia fases. En la primera, se pretende que el 30% de las 2.286 unidades de atención que la entidad tiene en todo el país alcancen la total provisión por medio de renovables, porcentaje que alcanzará el 70 % en 2020 y la totalidad hacia el final de 2021. Será cuatro años después que concluirá el proceso con la inclusión de los edificios administrativos y el centro de procesamiento de datos, ubicado en la localidad de Campinas, estado de São Paulo.
En la actualidad, sólo el 17 % de este consumo de las instalaciones del Santander es abastecido por fuentes como la solar, la eólica, pequeñas hidroeléctricas y biogás de rellenos sanitarios, aunque en la red de atención de Minas Gerais ya alcanza el 100 %, y alrededor del 70 % en Rio de Janeiro.
La filial brasileña del Santander cuenta con más de 50 mil empleados, es el primer banco extranjero por volumen de activos en el país y el tercero privado por tamaño de red y volumen de depósitos, también el segundo en patrimonio líquido.
El presidente de Santander Brasil, Sérgio Rial, aseguró: "Seremos 100 % renovables, y eso es parte de una agenda de responsabilidad socioambiental aún mayor, que pasa por la adopción de buenas prácticas en todas nuestras operaciones y relaciones con empleados, clientes, proveedores y la sociedad".
Se afirma que desde 2015 el Santander ha reducido en un 25 % el consumo de energía, y en un 79 % el consumo de agua, lo que ha permitido una reducción del 33 % en el volumen de emisiones de gases de efecto invernadero de la actividad.