Así se desprende del informe de Ofiso, que indica que, por categorías, los bonos verdes acumulan el 57% del total, los sociales el 18%, los sostenibles el 16%, los bonos ligados a la sostenibilidad se caen hasta el 8% y los muy marginales bonos de transición no llegan al 1%. Por sectores de actividad, el de mayor peso en la emisión de bonos verdes fue el sector corporativo, con el 42% del volumen emitido, hasta alcanzar los 8.818 millones; seguido del sector público que, incluyendo la emisión del bono verde del Tesoro, alcanzó los 8.265 millones y una cuota del 39%. Por tipo de bono emitido, las operaciones de bonos verdes representaron en 2023 el 72% del volumen total; las de bonos sostenibles el 16%, las de bonos sociales el 7% y las de bonos ligados a la sostenibilidad el 5%.
Las renovables captan la mayor parte
El estudio explica que el destino de los fondos captados en bonos verdes se mantuvo diversificado en tres principales categorías: energías renovables, con el 31%, movilidad sostenible, con cerca del 27%, y eficiencia energética, segmento que ha copado el 20% de los fondos. Además, la financiación sostenible representa el 18% de los bonos emitidos en el mercado español de renta fija -excluida la financiación del Tesoro Público- y alcanza un nuevo récord del 65% en el sector Corporativo.
Emisores e intermediarios
El ranking de grandes bancos y empresas emisoras de este tipo de deuda fue liderado en 2023 por Telefónica e Iberdrola (con 2.600 y 1.850 millones de euros en emisiones ESG, respectivamente) según el análisis de Ofiso, mientras que el Banco de Santander encabeza el ranking de intermediarios con una cuota del 10,1%, seguido por BBVA con el 9,7%, y Credit Agricole con el 9,2%. El informe destaca una macrooperación de préstamo sostenible de 5.300 millones de euros que sobresale sobre el resto, la derivada de la refinanciación de un crédito a Iberdrola, ligado a objetivos de reducción de emisiones de GEI y de igualdad de género en sus puestos ejecutivos
Las instituciones bancarias continúan implementando políticas sectoriales para impulsar la transición energética dirigidas, entre otros al sector inmobiliario, el agrícola, el acero, la hostelería, la automoción, la aviación, o el textil, si bien las categorías más beneficiadas en las operaciones de bonos siguen siendo energías renovables con un 31%, seguido por movilidad sostenible, un 27%, y eficiencia energética, un 20%. Los préstamos verdes, junto con los ligados a proyectos con un carácter eminentemente sostenible, y los ligados a indicadores de sostenibilidad sumaron en España, al menos 33.328 millones de euros, con un incremento del 11% según los datos públicos obtenidos sobre este tipo de instrumentos financieros. En concreto, el CO2 evitado gracias a los bonos verdes emitidos en 2022 fue de 3,3 millones de Tm CO2 equivalente, según los reportes de impacto publicados en 2023 que suponen más del 93% de los bonos verdes emitidos en el año anterior.
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