De esta manera, el 'pool' dejará este martes atrás los precios especialmente bajos que ha venido registrando en estos últimos días -con varias horas a lo largo de la jornada por debajo de la cota de los 10 euros/MWh-, debido a la gran presencia de la generación con renovables -especialmente la eólica- y a las sucesivos frentes atlánticos que han ido afectando a la Península, como Aline, la primera gran borrasca de la temporada. En lo que va de octubre, la media del mercado eléctrico se sitúa en los 90,13 euros/MWh, frente a los 125,98 euros/MWh que registró el 'pool' en el mismo mes de 2022.
Al precio medio del 'pool' se sumaría la compensación a las gasistas, que tiene que ser abonada por los consumidores beneficiarios de la medida, los consumidores de la tarifa regulada (PVPC) o los que, a pesar de estar en el mercado libre, tienen una tarifa indexada, pero que se sitúa nuevamente en 0 euros/MWh, situación que se repite desde el pasado 27 de febrero.La denominada 'excepción ibérica' se extendió hasta el próximo 31 de diciembre, tras el acuerdo alcanzado por España y Portugal con la Comisión Europea. Así, se prolongaba siete meses, hasta final de este año, y no se excluía que pudiera prorrogarse más tiempo si dicho marco también se aumentaba.
En concreto, el acuerdo no solamente representaba una extensión de la excepción ibérica que ya se aplicaba, sino que implicaba algunos ajustes para acomodarlo, como la referencia de precios, que hasta entonces se incrementaba en cinco euros al mes, y pasaba a ser más suave. En el acuerdo original, el citado precio de referencia para el gas tenía un valor medio de 48,8 euros/MWh: era de 40 euros/MWh durante seis meses, elevándose 5 euros/MWh cada mes a partir de entonces. Se incrementa en 1,1 euros/MWh desde el pasado abril, para concluir en 65 euros/MWh.
Actualmente, el mecanismo lleva sin tener efecto sobre los procesos de casación marginal en los mercados mayoristas desde finales de febrero debido al descenso del precio del gas natural por debajo de los umbrales fijados para su aplicación, pero, en caso necesario, la prórroga permitirá mantener un precio razonable, no tan dependiente de la evolución del gas natural.