La secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, ha presentado hoy el balance del sexto mes de vigencia del Plan Más Seguridad Energética. El Plan +SE fue aprobado el pasado 11 de octubre con tres objetivos principales: aumentar la protección de los consumidores, reducir el consumo energético y reforzar la solidaridad con el resto de la UE, incrementando las exportaciones de gas de forma directa o convertido en electricidad. Pues bien, Aagesen ha presentado hoy el Balance Invierno 2022-2023. Informe de Seguimiento. El balance coincide con el final del período previsto originalmente por la UE para que los estados redujeran un 15% su consumo de gas, período recientemente prorrogado hasta el 31 de marzo de 2023. Según los datos facilitados hoy por la secretaria de estado, España ha reducido su demanda de gas, entre agosto del año 22 y marzo del 23, más de veinte puntos: -21%.
La demanda acumulada de electricidad, por su parte, ha bajado siete puntos (-7%), cuantía equivalente a 24 días de consumo de gas. Otro dato que ha destacado la secretaria de estado en su balance es que el consumo de electricidad en las horas pico (el 10% con mayor demanda) se ha reducido casi diez puntos (-9,8%) entre el 1 de diciembre y el 31 de marzo, cumpliendo con ello otro de los objetivos establecidos por la Unión Europea (la UE solo pedía el -5%).
Desde el 1 de agosto, las exportaciones eléctricas a Francia suman 9,4 teravatios hora (TWh), frente a unas importaciones medias de 3,9 TWh en el mismo período de los últimos cinco años; en el caso de Portugal, cuya generación hidroeléctrica está muy mermada por la sequía, las exportaciones se alcanzan los 3,8 TWh.
Almacenamiento
Otro dato positivo que ha destacado Aagesen ha sido el relativo a los almacenamientos. El nivel de llenado de los almacenamientos subterráneos en la Unión Europea a 31 de marzo durante los últimos cinco años (2018-2022) apenas ha alcanzado el listón del 34%, mientras que ese listón se ha situado en el año 2023 en el 56%. Con respecto al año pasado (mismas fechas de 2022), la diferencia es aún mayor. En marzo de 2022, los almacenes de gas en la Unión Europea estaban en el entorno al 25%.
La secretaria de estado ha destacado tres motivos del buen comportamiento de los almacenamientos de gas en este año: "ha habido un esfuerzo ingente por parte de la UE con distintas medidas regulatorias y distintas medidas para fomentar la diversificación de suministro; ha habido un esfuerzo adicional con esos objetivos de almacenamiento; y hemos tenido un invierno con temperaturas más cálidas de la media de los últimos cinco años. Esas tres variables de forma conjunta nos han permitido no solo haber llegado a una situación más positiva al final del invierno, sino que tenemos una situación de partida, de preparación para el próximo invierno, muchísimo más positiva".
Ahora mismo la Unión Europea solo importa por gasoducto ruso el 7% del gas que necesita.
En lo que se refiere al almacenamiento en España, los números son aún mejores, según Aagesen. El nivel de llenado de los almacenamientos subterráneos españoles estaba a 31 de marzo en el 78%, cuando la media del último quinquenio se sitúa dieciocho puntos por debajo: en el 60,8%. La situación ahora mismo es mejor aún. Según los datos facilitados por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, el nivel ha alcanzado este pasado 12 de abril el 85%. "Esto supone -ha dicho Aagesen- que ya estamos prácticamente en el mes de abril estamos en las obligaciones de llenado que vamos a tener para el mes de noviembre del año 2023. Además, en el caso de España estamos hablando de almacenamientos estratégicos. No es el mismo caso en gran parte de la UE, que son almacenamientos de gestión de fuentes de aprovisionamiento".
España finaliza el invierno con un volumen disponible de gas almacenado a nivel subterráneo y en forma de gas natural licuado suficiente como para cubrir 40 días del consumo invernal histórico.
Un dato importante, "esencial", según Aagesen, es el relativo a la cotización del gas natural en los mercados. "Yo creo que todos sabemos que todo lo que ha ocurrido con la crisis ha tenido mucho que ver con el efecto contagio en el sistema eléctrico de la cotización del gas natural".
La secretaria de estado ha venido a señalar que el anuncio del tope del gas, "una medida muy relevante que se acordó en Europa", vino a funcionar como una especie de aviso a especuladores. Fue "una señal que se emitió -ha dicho- y bajó rápidamente el precio en los mercados internacionales... en el TTF, que es el gran indicador y referencia a nivel europeo, y también en el Mibgas".
Nótese la evolución del precio en el gráfico. La media en el mercado ibérico del gas del mes de marzo del 23 se ha situado en los 43,5 euros el megavatio hora (43,5 €/MWh), muy por debajo de los registros Mibgas de agosto del 22, cuando se vivieron precios superiores a 160 €/MWh, y extraordinariamente por debajo de los guarismos registrados en el TTF, cuando se llegó a los 300 €/MWh.