La Comisión quiere movilizar 100.000 millones de euros entre 2021 y 2027 para apoyar la transición "irreversible" –como la ha calificado von der Leyen– hacia una economía libre de emisiones, y confía en que las líneas generales de su propuesta sean aprobadas en la cumbre de jefes de Estado o de Gobierno que empieza mañana jueves, según informa Europa Press y otras agencias. Von der Leyen cuenta ya con el apoyo el Parlamento Europeo, que recientemente aprobó la declaración de emergencia climática.
El Ejecutivo comunitario confía en que esos 100.000 millones sirvan para movilizar inversiones que superen los tres dígitos durante el periodo comprendido entre 2021 y 2027 y que la cifra se comparta entre todas las regiones europeas que tendrán acceso a este fondo. Esta "hucha", una de las grandes estrellas del Green Deal, servirá para ayudar a las regiones y países más reticentes en la reducción de la emisiones, como Estonia, Hungría o Polonia, país todavía muy dependiente del carbón.
"El Pacto Verde Europeo es nuestra nueva estrategia de crecimiento", aseguró Von der Leyen al presentar el pacto, junto con el calendario de medidas que se ha marcado como prioridad. La primera, incrementar los objetivos de reducción de emisiones contaminantes de la UE en 2030, hasta "al menos" un 50% y "hacia" el 55%. Ahora están fijados en un 40%.
Alcanzar la neutralidad climática en 2050 supone que la UE no podrá emitir a partir de ese año más CO2 del que sea capaz de absorber en su territorio.
Este mayor esfuerzo de reducción exigirá revisar todas las normativas aprobadas durante los últimos años. Entre otras, el sistema europeo de comercio de emisiones (ETS, por sus siglas en inglés) para encarecer el precio de las emisiones. Y habrá sectores como el marítimo, que empezarán también a contabilizar. También se reducirán los créditos gratuitos que se conceden a las aerolíneas.
Von der Leyen dijo que la Comisión acompañará todos sus esfuerzos con un mayor activismo a nivel internacional, para animar a otros países a incrementar su ambición en la lucha climática a través de una diplomacia verde centrada en "convencer y apoyar". El Pacto Verde europeo plantea también otras medidas, como una nueva estrategia industrial o un nuevo plan de acción en materia de economía circular, así como nuevas iniciativas para impulsar la renovación de edificios con mayor eficiencia energética, estrategias para garantizar la protección de los ecosistemas y la biodiversidad, desarrollar una agricultura más ecológica y acelerar la transición hacia una movilidad "limpia e inteligente".
Un plan ambicioso, sólido y coherente
La miinistra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha calificado el plan europeo de "ambicioso y sólido", que "nos ayuda a ganar coherencia en políticas domésticas y exteriores de la Unión Europea". Ribera ha añadido que se trata de "una excelente noticia" que nos ayudará también a generar "entornos de socios que se animen a hacer lo mismo":
La ministra, que está totalmente embarcada en su trabajo de "facilitadora" para que la COP25 alcance un acuerdo final a la altura de lo que demanda la situación de crisis climática en la que estamos ya inmeros, ha terinado indicando que se trata "de un paso adelante fundamental para lograr la neutralidad climática de Europa en 2050 y como consecuencia de ello conseguir el activismo que queremos y esperamos de los demás".
Artículos relacionados
El vicepresidente de la Comisión Europea debate con 250 jóvenes en la Cumbre Mundial del Clima de Madrid (¿Qué es el Pacto Verde Europeo)
