EDP-C, que transferirá a Total los 280 empleados que gestionan las actividades adquiridas por la compañía francesa, se dedica a la producción de activos térmicos, así como al suministro de gas y electricidad y a otros servicios relacionados como suministro de electricidad a pequeños clientes industriales y comerciales, a pequeñas empresas y a clientes residenciales, y suministro al por menor de gas a pequeños clientes industriales y comerciales, y a clientes residenciales. La compañía tiene unos 2,5 millones de clientes.
La petrolera Total produce y provee energía a escala internacional, con actividades en todos los sectores de la industria del petróleo y el gas, así como en los de las energías renovables y la producción de electricidad. La operación de compra venta se ha realizado por un importe de 515 millones de euros.
Con esta adquisición, el grupo francés continua su crecimiento en España, donde cuenta, a través de Total Solar International, con una cartera de casi 2 GW en proyectos fotovoltaicos que adquirió el pasado mes de febrero, y se convierte en el cuarto proveedor de gas (12% de cuota) y de electricidad del país (cuota del 6%). Según sus propios datos, la empresa tiene una capacidad bruta de producción de electricidad procedente de fuentes renovables de 3 GW y se ha fijado como objetivo 2040 una cartera de actividades eléctricas con bajas emisiones de carbono que debe representar entre el 15% y el 20% de su mix de ventas.
La Comisión llegó a la conclusión de que la concentración propuesta no plantearía problemas de competencia, ya que los solapamientos entre las actividades de las empresas son muy limitados. La operación se examinó en el marco del procedimiento simplificado de control de las concentraciones.