Un súperbanco, una constructora y una eléctrica… Son la santísima trinidad de la economía española... La organización no gubernamental Intermón Oxfam presentó ayer «Beneficios para quién. Los paraísos fiscales como principal amenaza para una fiscalidad justa», un informe de medio centenar de páginas en el que se repasa el comportamiento fiscal de las empresas del IBEX35. La ONG ha analizado “las cuentas anuales y las memorias de sostenibilidad publicadas por dichas empresas sobre el ejercicio 2014”. Intermón Oxfam ha elegido este índice bursátil selectivo porque en él se encuentran “las principales empresas españolas por capitalización bursátil y volumen de facturación”.
Más crisis, más paraíso
Pues bien, «Beneficios para quién…» revela que, “en 2014, el número de filiales [de empresas del IBEX35] en paraísos fiscales creció un 10% hasta alcanzar un récord de 891 frente a las 810 del año anterior”. La empresa española que encabeza este triste escalafón es el banco Santander: “al cierre de 2014 –señala el informe- mantenía 235 filiales en diferentes paraísos fiscales (una de cada cuatro del total de las empresas del IBEX35)”. ACS, la compañía que dirige el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, ocupa el segundo puesto, con 113 filiales, seis menos que el año anterior. Siguen, en tercer, cuarto y quinto lugar, Iberdrola, Abengoa y el BBVA, con 69, 67 y 52 filiales en paraísos fiscales, respectivamente.
Según Intermón Oxfam, los paraísos fiscales son “territorios que intencionadamente han adoptado un marco legal que cuenta con las siguientes características: baja o nula tributación, ventajas fiscales para los no residentes (sin necesidad de justificar una actividad económica sustancial y real), falta de cooperación con otras administraciones tributarias, y, por fin, opacidad (marcos legales que permiten la no identificación de las entidades registradas ni de sus titulares o propietarios de los activos)”. Esta definición ha sido elaborada por Oxfam y otras oenegés, como Tax Justice Network o Eurodad. En el otro plato de la balanza, y según explica Carlos Cruzado, presidente del sindicato de técnicos de Hacienda (Gestha): “cada español tiene que pagar entre 800 y 1.000 euros al año en impuestos por el coste del fraude fiscal”.
Según el informe de Oxfam, “el uso de los paraísos fiscales es una práctica muy generalizada, quizá un modus operandi para las empresas del IBEX35”. Todas estas empresas, las 35 –revela el estudio- están presentes en paraísos fiscales. Es más: “desde el año 2009 [es decir, desde comienzos de la crisis], han incrementado en un 240% el número de filiales en estos países”. El Gobierno de España tampoco parece muy sensibilizado con este asunto. Según este informe, la definición de paraísos fiscales en España se rige por el Real Decreto 1080/1991, “que aportaba una lista inicial de los territorios considerados paraísos fiscales por la legislación española, basada principalmente en el principio de opacidad y el intercambio de información”. En este listado constaban 48 territorios.
Modificación en 2003 (último Gobierno Aznar); Modificación en 2014 (Gobierno Rajoy)
Pues bien –continúa Oxfam-, “una modificación posterior, de 2003 [último Gobierno Aznar], determinaba que se dejaba de considerar como paraísos fiscales aquellos territorios que firmasen con España acuerdos de intercambio de información, y, por ello, la lista se ha ido reduciendo hasta quedarse en el momento actual en 33”. Entre las 15 jurisdicciones que salieron en 2003 de la lista de paraísos fiscales –explica el informe- nos encontramos con Panamá, Andorra, Bahamas, Bermudas o Hong Kong, “algunos de ellos, entre los más frecuentemente utilizados por intermediarios para la creación de sociedades offshore, tal y como han revelado los Papeles de Panamá”. Más aún, añade el estudio: en 2014, el Ejecutivo Rajoy incluyó “una exención en el régimen general de todos los dividendos y plusvalías que los grupos empresariales repatríen desde el extranjero”.
Intermón Oxfam explica este último artificio, o truco, legal
“La secuencia es la siguiente: una empresa española manda de viaje sus dividendos y plusvalías a un paraíso fiscal camuflándolas como inversión. En el paraíso fiscal estas cantidades se declaran, pero no se paga impuestos por ellas. Finalmente, se devuelven otra vez a España, donde gracias a la nueva exención, entran limpias de polvo y paja, es decir, toman el camino de retorno sin que se tenga que tributar por ellas. Vacaciones de ida y vuelta de beneficios empresariales”. Según el informe «Beneficios fiscales…», en España, la presión fiscal sigue recayendo “muy desproporcionadamente sobre el consumo y el trabajo, mientras la riqueza queda prácticamente desfiscalizada y la contribución empresarial se ha desplomado”. Así, cuantifica Oxfam, “el 86% del total recaudado en 2015 recae sobre las aportaciones de las familias (a través del IRPF y el IVA), mientras las grandes empresas apenas aportan el 4% del total”.
Según «Beneficios para quién. Los paraísos fiscales como principal amenaza para una fiscalidad justa», informe que presentó ayer la oenegé Intermón Oxfam, todas las empresas que cotizan en el IBEX35 tienen filiales en paraísos fiscales. Entre las energéticas, Endesa, que fue vendida a la empresa pública italiana Enel, es la que menos tiene (solo dos filiales en paraísos fiscales), Gas Natural Fenosa tiene diecinueve (19), Acciona tiene 31 y Repsol, más de medio centenar (51). Iberdrola es, con diferencia, la que más filiales tiene en esos territorios remotos: 69. Gamesa, cuyo principal accionista es Iberdrola, tiene otras quince. El informe Oxfam analiza las cuentas anuales y las memorias de sostenibilidad 2014 publicadas por las empresas del IBEX35. Ese año -2014-, Iberdrola lanzó una campaña publicitaria cuyo lema era “Iberdrola eres tú”. El mensaje lo enunciaban varios actores que interpretaban a accionistas de la compañía. Una de esas accionistas era Marta:
"Hola, soy Marta, accionista de Iberdrola. Sí, sí, y desde hace mucho, mucho tiempo y como yo, hay 650.000 personas más que cobramos los dividendos de Iberdrola. A mí, mira, me ayuda a completar mi pensión y ¿sabes? así vivo mucho mejor y más tranquila". Iberdrola eres tú. Empresa colaboradora de Vitoria–Gazteiz, Capital Verde Europea 2012. Puedes escuchar el audio aquí.
Según el presidente del sindicato de técnicos de Hacienda de España, Carlos Cruzado, “cada español tiene que pagar entre 800 y 1.000 euros al año en impuestos por el coste del fraude fiscal”.