En el sector de la energía renovable, la digitalización debe utilizarse como vía para unir por un lado la optimización de la operación y por otro el mantenimiento de las plantas. Gracias al ‘Big Data’ y a la Inteligencia Artificial, las compañías tendrán la capacidad de mejorar el rendimiento y ajustar el servicio de red, todo ello en tiempo real
El análisis de datos ofrece posibilidades infinitas, aunque la recopilación de estos sigue siendo un gran desafío. Actualmente, estos datos no sólo están descentralizados y en manos de operadores de red, gestores de plantas y consumidores, sino que, además, no se encuentran disponibles de forma estandarizada. Las empresas tienen que salvar varios procesos para analizarlos y usarlos posteriormente como base para la toma de decisiones.
Por otro lado, está previsto que la Inteligencia Artificial lidere la optimización del sector energético. A través del estudio y la evaluación de la información disponible, será capaz de controlar los sistemas de gestión. Los primeros proyectos ya muestran el gran potencial que supone la inteligencia artificial, que a pesar de su eficacia siempre necesitará de cierta supervisión humana.
BayWa r.e. es una de las empresas del sector que más apuesta por la digitalización. Por ejemplo, sus sistemas de monitorización centralizados gestionan 3,5 GW en plantas eólicas globalmente. Estos centros de control permiten visualizar los datos en tiempo real, conocer las especificaciones de seguridad de cada país y detectar con antelación fallos. Los centros de control trabajan las 24 horas del día todos los días del año. Esto optimiza la planificación del trabajo y facilita una comunicación fluida con los equipos locales que se benefician de las ventajas de un sistema global de seguimiento en sus instalaciones. En España, BayWa r.e. cuenta con más de 29 plantas eólicas y fotovoltaicas en mantenimiento, gestiona 600 MW en cartera y cuenta con un pipeline de 2,25 GW para 2025.
El Asset Management de activos renovables es otro de los servicios que ofrece la compañía. Esta área engloba actividades de apoyo para garantizar el mejor funcionamiento de las plantas de energía, a nivel individual o a nivel de una cartera.
En definitiva, las empresas que intensifiquen la digitalización dentro de sus estructuras y procesos serán las que lideren el desarrollo de la energía renovable. La digitalización es sin duda la palanca de cambio hacia el progreso y éxito en la lucha contra la crisis climática.