En Genera 2018 hay empresas de Alemania, España, Francia, Grecia, India, Italia, Portugal, República Checa y Rumanía. Exponen novedades en equipos y servicios relacionados con las distintas fuentes energéticas y los diferentes sectores (desde las renovables a la cogeneración, trigeneración, microgeneración, hidrógeno y pila de combustibles, así como gas, petróleo y carbón), junto con las propuestas de movilidad y de empresas de servicios energéticos.
El foco está puesto especialmente en las distintas soluciones encaminadas a incrementar la eficiencia energética de las instalaciones y soluciones de sostenibilidad, con una presencia destacada de la solar fotovoltaica pero también de suministros para producción eólica, biomasa, iluminación, led, etc., así como propuestas relacionadas con el autoconsumo y la gestión de facturas.
Jornadas Técnicas
El Salón, organizado en colaboración con el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), completa su contenido con el desarrollo de un programa de Jornadas Técnicas para el análisis, el debate y la divulgación sobre los avances y tendencias del sector de las energías renovables, la eficiencia energética y el medio ambiente.
En este contexto, y de la mano de las principales asociaciones sectoriales, centros tecnológicos y administraciones públicas, se desarrollarán 22 sesiones especializadas en las que expertos y profesionales analizarán los principales retos y oportunidades para el desarrollo del sector.
Las Jornadas tratarán, entre otras cuestiones de eficiencia energética en entornos urbanos para mitigar el cambio climático, autoconsumo en la red, edificios de consumo casi cero y soluciones para la descarbonización de los países, mostrando los nuevos retos y oportunidades en el desarrollo del sector.
8.511 M€ en aportación al PIB nacional
Según los últimos datos publicados por la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA) en su informe “Estudio del impacto macroeconómico de las energías renovables en España”, la aportación total del sector de las energías renovables al PIB en 2016 fue de 8.511 millones de euros (un 0,76% del mismo). La contribución directa al PIB aumentó con respecto al año anterior un 2,6% hasta alcanzar los 6.898 millones. Por lo tanto, es el segundo año consecutivo que la contribución directa y total experimenta crecimientos porcentuales.
Teniendo en cuenta el conjunto de tecnologías, la que más contribuyó al crecimiento del PIB en 2016 fue –al igual que el año anterior– la energía solar fotovoltaica (32,37%); seguida de la eólica (22,38%), la energía solar termoeléctrica (16,45%), la biomasa eléctrica (15,44%), los biocarburantes (6,91%), la energía minihidráulica (3,80%) y, por último, el resto de renovables (2,65%).
Debido a la presencia, cada vez mayor, de las empresas españolas de renovables en los mercados internacionales, la balanza comercial del sector volvió a registrar un saldo positivo, por valor de 2.793 millones en 2016. Las exportaciones de bienes y servicios sufrieron un leve recorte, situándose en los 4.028 millones, y las importaciones aumentaron hasta los 1.235 millones.
El sector de las renovables es, además, uno de los que más invierte en I+D+i, destinando a ella 234 millones de euros, un 3,39% de su contribución al PIB.
La apuesta internacional por las energías renovables no está motivada solo por la preocupación medioambiental, siendo muchos los beneficios que estas tecnologías tienen para la economía. En la actual coyuntura de precios del petróleo al alza es importante recordar que las renovables evitaron en España la importación de 19.945.081 toneladas equivalentes de petróleo, un ahorro económico equivalente de 5.989 millones de euros. También evitaron la emisión de 52,2 millones de toneladas de CO2 que supusieron un importe de 279 millones de euros.
Renovables eléctricas
Las energías renovables también han ayudado a controlar los costes del sistema eléctrico, superando los ahorros a las primas recibidas. Durante el año 2016, la presencia de renovables en el mix de generación supuso un ahorro medio del precio en el mercado diario de 21,50 €/MWh.
En total, los ahorros supusieron 5.370 millones de euros frente a 5.360 millones de retribución regulada percibida (las famosas primas a las renovables). Esto es: sin estas energías, nuestra electricidad habría sido más cara.
En el caso de los empleos, se produjo una disminución del 3,6%, y de los 75.475 puestos de trabajo alcanzados en 2015 se bajó hasta los 74.566 en 2016. La destrucción de empleo, más acusada en la biomasa para generación eléctrica, biocarburantes, solar térmica y minihidráulica, sitúa al sector en la cifra más baja desde que se realizan estos estudios macroeconómicos.
El sector ha perdido más del 40% de los empleos que generaba en 2009. Sin embargo, gracias a la adjudicación de las subastas de 2016 y 2017 y la plena competitividad económica alcanzada por tecnologías como la eólica y la fotovoltaica, las perspectivas de empleo futuras son muy positivas.