Lo explicaba hace unos días en un desayuno informal con periodistas Carlos Moyá, presidente de Fenie: "Somos una compañía con 2.500 agentes energéticos, repartidos por toda España, que están muy cerca del cliente para asesorarle y ayudarle en la transición energética". Y muchos de estos clientes llevan años con ellos: "Primero fue cliente el abuelo, luego el padre y ahora son los hijos", prosigue Moyá. "Muchos llevan con nosotros 30 años, confían en nosotros porque saben que no queremos ´venderles ninguna moto´ y les decimos las cosas claras".
Ese modo de hacer diferente, cercano, con conocimiento directo del cliente y centrado en la asesoría experta y la eficiencia energética, ha llevado a Fenie Energía a consolidar su modelo de negocio y contar con "el mejor equipo de profesionales", en palabras del presidente de la compañía, quien insiste en que "son estos agentes energéticos (los antiguos instaladores) los que han hecho posible convertir el sueño en realidad. Y todos reman juntos".
En la actualidad el "equipo" está formado por 2.500 agentes energéticos, que son, además, accionistas de la compañía y mantienen contacto directo con más de 400.000 clientes. Esa cercanía y experiencia han permitido a Fenie mantener un crecimiento sostenido, "lo que supone una gran ventaja para afrontar los grandes retos a los que se enfrentan el sector y la sociedad en general", dice Moyá. Y, muy importarte, que todos podamos "participar de manera activa en la generación de energía y optimizar el consumo, apostando además por la energía verde y por nuevos modelos de autoconsumo".
El futuro, en nuestras manos
Respecto a esta nueva década, Moyá indicó que Fenie la afronta "llevando su misión un poco más lejos". No se trata solo de que cumplir con los objetivos de Desarrollo Sostenible fijados por Naciones Unidas, con los que prácticamente todas las compañías se han comprometido. "Nuestra misión es, además, facilitar que nuestros clientes se sumen a un nuevo modelo energético y contribuyan de un modo decisivo al cambio responsable gracias a la asesoría experta de nuestros agentes”.
"Ahora todos podemos participar en ser más eficientes y en que la energía sea más verde", insiste el presidente de Fenie, convencido, además, de que estamos solo en el inicio de la transformación energética. "Vendrán nuevas modalidades de inversión, no solo para los compañias sino también para el cliente final", asegura. Por ejemplo, "estamos mirando la posibilidad de que un cliente que viva en un bloque de pisos en donde por cuestiones físicas no quepan instalaciones fotovoltaicas, pueda, mediante autoconsumo virtual, invertir una pequeña cantidad en un parque solar y que los beneficios se le descuenten de la factura". Posible es. "Otra cosa es que la fiscalidad y la legislación lo faciliten", concluye.