La encuesta, realizada por la empresa Ipsos Mori por encargo de La Asociación China de Industrias de Energías Renovables (CREIA), se hizo sobre una muestra de 3.000 personas y ha puesto de manifiesto que al 97,6% de los consumidores chinos preferiría comprar energía limpia.
De ellos, el 90,6 por ciento dijo que aceptaría aumentos de hasta el 10 por ciento en su factura de electricidad mensual, lo que equivaldría a una subida media de $1.50 al mes. Otro 87 por ciento dijo querer que el recibo de la luz incluya información sobre la fuente de energía.
Actualmente, los consumidores chinos no tienen la opción de seleccionar su fuente de suministro. En China, la generación de electricidad está controlada por el Estado y aunque el gigante asiático es desde hace tres años el mayor inversor mundial en energías renovables, esa posibilidad no existe.
Este entusiasmo chino por las energías limpias es muy superior al detectado en encuestas similares realizadas en los últimos dos años en EEUU y Reino Unido, países que, sin embargo, sí ofrecen a sus ciudadanos la posibilidad de adquirir energía verde, tanto generada por nuevas eléctricas verdes como por viejas compañías convencionales que incluyen este paquete en su oferta (como también es el caso de España).
Peng Peng, director de investigación de políticas en CREIA, ha declarado que la encuesta ha revelado niveles "sin precedentes" de apoyo a la energía limpia en China. “En EEUU, el porcentaje de personas dispuestas a pagar más por la energía verde es del 50 por ciento y del 48 por ciento en RU”, añadió.
El sondeo ha dejado también claro que la contaminación del aire es la espoleta que ha disparado el interés de los consumidores chinos por las renovables. La quema masiva de carbón que ha impulsado el crecimiento de China en las últimas décadas ha convertido el aire de muchas de sus ciudades en una densa niebla tóxica. Más del 90% de los encuestados dijo que la "energía verde" podría reducir esta contaminación. (El consumo de carbón de China comenzó a caer en 2014 por primera vez en este siglo, y el año pasado sus emisiones de carbono disminuyeron el 1,5%).
CREIA lleva tiempo pidiendo al gobierno chino acceso prioritario a la red de la energía generada con fuentes lumias y que las empresas generadoras puedan ofrecer tarifas verdes a los clientes.
La encuesta ha sido dado a conocer pocos días después de conocerse las nuevas cifras de la Administración Nacional de Energía de China (NEA), según las cuales las energías renovables representaron casi una cuarta parte de la generación de energía de China el año pasado, en su mayor parte hidroeléctrica.
Sin embargo, los datos también han confirmado que debido a las restricciones de acceso a la red y los problemas de conexión 39 mil millones de kWh de capacidad estaban parados el año pasado.