El informe de la OECD 'El impacto en el empleo de la transición hacia una economía baja en carbono y eficiente', presentado recientemente en Bruselas y del que se hace eco la Fundación Biodiversidad, pone de relieve ese cambio de modelo, y lleva al organismo europeo a recomendar a los miembros de la UE a invertir en la eco-innovación y en la difusión de tecnologías verdes para impulsar la creación de empleo.
Solo el desarrollo del sector de las energías renovables, dice la OECD, sería responsable de tres millones de nuevos puestos de trabajo, mientras que la aplicación de las medidas de eficiencia energética acordadas en el seno de la Unión Europea crearía otros dos millones, de aquí a 2020.
Así lo expuso durante la presentación del informe el comisario europeo de Empleo y Asuntos Sociales, Laszlo Andor, quien ha pedido a los Estados miembros que tomen medidas para explotar el potencial de la "economía verde".