La elevada demanda ha permitido que la nueva referencia se haya emitido con un cupón del 1% y una rentabilidad del 1,034%, reduciéndose el coste de financiación para el Tesoro por el carácter verde de la emisión, según informa Europa Press.
Asimismo, la tasa ha contribuido a reducir el coste medio de la cartera de deuda viva del Tesoro, que sitúa en el 1,65% frente al 1,85% de principios de año. La vida media de la cartera de valores del Tesoro Público, por su parte, aumenta hasta los 8,09 años, según datos del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
Atendiendo al tipo de inversor, la mayor participación ha correspondido a las aseguradoras y fondos de pensiones, que han representado un 47%, seguidas de las gestoras de fondos (18,8%), los bancos centrales e instituciones oficiales (9,5%), y las tesorerías de los bancos (8,9%). El resto de inversores bancarios ha representado un 8,7%, los fondos apalancados un 2,9% y el resto de inversores un 4,2%.
Fuerte participación internacional
En la distribución por países destaca la participación de inversores de Francia e Italia, con el 25,3%, Alemania, Austria y Suiza, con el 20,2%, el Reino Unido e Irlanda, con un 14% y el resto de la Unión Europea, con un 13%. Los países nórdicos han representado un 11,9%, Estados Unidos y Canadá un 4,1%, Asia un 2,1% y Oriente Medio un 0,6%. Otros inversores han representado un 0,5%.
La prima de este bono sobre el equivalente es de 6 puntos básicos y los bancos colocadores de la emisión han sido Barclays, BBVA, Credit Agricole CIB, Deutsche Bank, JP Morgan y Santander.
El primer programa de emisión de bonos verdes soberanos de España se destinará a la financiación de una "amplia" variedad de programas medioambientales. En concreto, el Ejecutivo ha identificado más de 13.600 millones de euros de gasto verde elegible para financiar dichos proyectos.