Los primeros países clasificados, del 1 al 10, son: Suecia, Suiza, Canadá, Noruega, Finlandia, Nueva Zelanda, Dinamarca, Japón, Francia y Austria. Estados Unidos ocupa el puesto 12, Reino Unido el 15 y España el 16. Pero otros 90 países están aún lejos de alcanzar un sistema de energía sostenible.
El índice está incluido en el informe World Energy Trilemma “Time to get real – the case for sustainable energy policy” y muestra cómo la mayoría de los países todavía no han logrado equilibrar las dimensiones críticas del régimen energético.
Seguridad, equidad, cuidado del medio ambiente
La definición que da el WEC de sostenibilidad energética se basa en tres dimensiones básicas: la seguridad energética, la equidad social y la mitigación del impacto ambiental.
En este sentido, sus autores indican que “el desarrollo de sistemas de energía estables, asequibles y ambientalmente adecuados no permite soluciones sencillas.” Casar los tres objetivos anteriores “implica actuar sobre complejos vínculos entretejidos entre los actores públicos y privados; los gobiernos y los reguladores; los factores económicos y sociales; los recursos nacionales, las preocupaciones ambientales y los comportamientos individuales”. Y como señala el presidente del WEC, Pierre Gadonneix, “todos los países se enfrentan a retos en su transición hacia sistemas energéticos más seguros, respetuosos con el medio ambiente y equitativos",
"Lo que marca la diferencia –añade– es la forma en que (cada país) establece sus objetivos finales, cómo equilibra la economía de mercado y las políticas públicas, y cómo diseña las políticas más inteligentes con el fin de promover la eficiencia y optimizar los costes, recursos e inversiones a largo plazo”.
Apostar por la sostenibilidad energética mejora la economía
Algunas evidencias puestas de relieve por el Índice son que la mitigación del impacto ambiental continua siendo un problema universal o que proporcionar acceso a la energía de alta calidad y asequible es un gran reto para las economías emergentes. Pero, como señala Joan MacNaughton, Presidente Ejecutivo del World Energy Trilemma report, la elaboración de este Índice también ha permitido descubrir aspectos positivos.
“El Índice ha puesto en evidencia que los países que utilizan una mayor proporción de energía baja en carbono, como las energías renovables y la energía nuclear como parte de un mix energético diversificado, tienden a obtener mejores resultados. Y aunque los mejor posicionados son países ricos, los menos pudientes que trabajan en la sosteniblidad energética superan a sus iguales económicos. Lo que distingue a todos estos países de los restantes es que cuentan con políticas más eficaces y coherentes".
Mark Robson, socio de Oliver Wyman, consultora que compila el índice con la WEC, añade: "proporcionar energía sostenible es responsabilidad del gobierno y la industria”. Y “mientras los gobiernos sopesan las prioridades de su país, los empresarios deben tener la seguridad de que sus inversiones no serán destruidas por cambios en la política energética”, añade.
En este sentido, el Índice incluye tres recomendaciones a las autoridades para acelerar el desarrollo de sistemas energéticos sostenibles: 1) diseñar políticas energéticas coherentes y predecibles. 2) crear las condiciones de apoyo al mercado que atraigan inversiones a largo plazo. y 3) fomentar las iniciativas que favorezcan la investigación y el desarrollo en todas las áreas de tecnologías energéticas.
Así, el WEC recomienda a los políticos “establecer políticas coherentes y de largo plazo, accesibles, predecibles y transparentes que se elevan por encima de intereses mezquinos para responder a las necesidades energéticas de manera integral”. Además, de acuerdo con el informe, las políticas energéticas deben actuar tanto a nivel nacional como regional. En el ámbito nacional, “complementando y uniendo la industria nacional, la financiera, la ambiental, de transporte y los objetivos y las políticas agrícolas”. En el regional “coordinando las infraestructura, el medio ambiente y las cuestiones reglamentarias”.
http://www.worldenergy.org/documents/world_energy_trilemma_2012__executive_summary__final.pdf