España se ha consolidado como una gran potencia energética renovable, en ventaja competitiva frente al resto de países europeos; país del que destaca Aragón por ser la punta de lanza de la energía verde ya que se sitúa en una posición especialmente destacada, debido a su disponibilidad de suelo industrial, sol y viento. Es una de las muchas conclusiones del último informe de Foro Sella 2024, que también indica que se hace cada vez más necesario un enfoque europeo la creación de un mercado único energético, así como el desarrollo de herramientas de financiación para que este mercado pueda competir con potencias como Estados Unidos o China. Para ello, destacan cuatro claves para el éxito de la transición energética, tanto desde la perspectiva medioambiental como económica:
1) Impulso de la demanda
En los últimos años, la transición energética se ha realizado a través del incremento de la producción renovable, fundamentalmente eólica y fotovoltaica, que no obstante no ha hecho crecer el consumo eléctrico, sino que este ha descendido. Por ello, la transición energética solo será posible a través de un impulso de la demanda eléctrica. "Impulsar la electrificación de la economía, contando para ello con redes de distribución sólidas, es la única vía para integrar las renovables en el sistema", explica Albert Concepción, director del Foro Industria y Energía.
2) Desarrollo de sistemas de almacenamiento
El desarrollo tecnológico de los sistemas de almacenamiento y la hibridación son herramientas básicas para transformar el paradigma de las renovables, ya que permiten un mejor aprovechamiento del recurso y de los puntos de acceso. El informe de Foro Sella señala que los sistemas de almacenamiento tienen un gran protagonismo en el desarrollo de las renovables, ya que eliminan el principal inconveniente que siempre han tenido estas energías, la falta de gestionabilidad. A través del almacenamiento como baterías, saltos hidroeléctricos o bombeo reversible, se garantiza la estabilidad y la gestionabilidad del suministro, además de control de precios.
3) Apoyo institucional
El informe apunta la importancia del factor institucional, necesario para eliminar barreras y para que todas las oportunidades que trae consigo la transición energética puedan emerger de manera natural. En ese sentido, el papel de las administraciones se basa en buscar la coherencia del marco institucional a todos los niveles: europeo, nacional y local. En clave europea, este apoyo consiste también en un impulso a la financiación, necesaria para una descarbonización de la industria que a su vez mantenga su competitividad.
4) Impulso de la industria de la descarbonización
Por último, el texto señala que la transición energética supone una oportunidad para el nacimiento de un nuevo sector productivo, el de la energía limpia. Dentro de este segmento, es importante apostar por la economía circular, incluyendo en la cadena de valor el reciclado del equipamiento empleado para producir las energías renovables, de modo que se termine el ciclo y podamos hablar de "energía circular".
Otras conclusiones
• En comparación con los combustibles fósiles, la electrificación conseguiría una reducción del 58% de las necesidades energéticas en España, que daría como resultado un ahorro de costes anuales de alrededor del 64%.
• España podría crear 240.000 puestos de trabajo d largo plazo y a tiempo completo gracias a las energías renovables.
• La superficie necesaria en España para desarrollos de energía eólica y solar sería del orden del 0,84%, ubicada principalmente en tierra.
