"Lo venimos diciendo y lo repetimos: en esta ley sigue faltando ambición climática y sobran cesiones al lobby gasístico", señalan en un comunicado conjunto ambas formaciones, y dicen que para que la ley climática "no nazca vieja y obsoleta, debe y puede ser mucho más ambiciosa tal y como piden la ciencia, la juventud y las organizaciones ecologistas".
Para ello, defienden una mayor reducción de emisiones para 2030. Más País y Verdes Equo plantean, cara a la votación del jueves, una enmienda transaccional que pide subir ya al 30% la ambición para 2030 y que luego esta meta se revise al alza en 2023.
Consideran, además, "inadmisibles las cesiones al lobby gasístico". Explican que tal como está planteado,"el artículo 8 (de la ley) no garantiza la prohibición de las exploraciones hidrocarburos, como es el caso de Álava. Y en el artículo 11, "tras el acuerdo de PSOE y UP con el PNV, se abre la puerta para utilizar gas como combustible para todo el transporte, incluido el de carretera". Esto supone, afirman, "un retroceso enorme en la transición ecológica ya que introduce por la puerta de atrás a los combustibles fósiles, en detrimento de la electrificación renovable del transporte".
Las dos formaciones tampoco entienden el rechazo de PSOE y UP a aceptar la Asamblea Ciudadana Climática. "Necesitamos más participación ciudadana para una transición ecológica justa. Fue un compromiso del Ministerio de Transición Ecológica y se aprobó una enmienda nuestra en los Presupuestos Generales para ponerlas en marcha. Es incomprensible que ahora no quieran incluirlo en la lay".
En la misma línea que Equo y Más País, las grandes organizaciones ecologistas de España defienden la necesidad de que la ley del clima sea más ambiciosa y piden incrementar hasta un 55% la reducción de emisiones para 2030 y así garantizar que España contribuya, de acuerdo con su capacidad y responsabilidad, a limitar el calentamiento global a 1,5 grados.
Juan López de Uralde, diputado de Unidas Podemos y presidente de la Comisión para la Transición Ecológica en el Congreso, defiende, sin embargo, que la tramitación de esta ley, que ha calificado como "una de las más importantes de la legislatura", permitirá mejorar su contenido y hacer de ella una norma “más ambiciosa y eficaz en la emergencia climática”.
La Ley de Cambio Climático ha recibido más de 750 enmiendas y llega al Congreso tras una ardua tramitación y sin el consenso deseado por el PSOE, que se había comprometido a presentar la ley solo si gozaba de “máximo consenso social y político”.
