"Viaje hacia el cuidado de nuestro hogar común: cinco años después de la Laudato si", nombre de este nuevo documento, presentado ayer, pide un claro compromiso con el desarrollo sostenible bajo en carbono para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, poniendo el acento en estos sectores:
• Alimentos/Naturaleza: se pide promocionar una agricultura diversificada y sostenible, la defensa de los pequeños productores y los recursos naturales, y la necesidad urgente de una educación sobre alimentos saludables, tanto en cantidad como en calidad. También se hace un fuerte llamamiento para combatir fenómenos como la apropiación de tierras y los grandes proyectos agroindustriales que contaminan el medio ambiente, así como para proteger la biodiversidad.
• Invertir en energía renovable: se invita a reducir la contaminación, a descarbonizar los sectores energéticos y económicos, y a invertir en energía limpia y renovable, haciéndola accesible a todos. El documento continúa pidiendo la reforma de los subsidios a los combustibles fósiles e impuestos sobre las emisiones de CO2.
Este es el primer respaldo a la campaña de desinversión en combustibles fósiles que viene del Vaticano en su conjunto. En mayo de 2020, 42 instituciones religiosas en 14 países anunciaron su compromiso de abandonar los combustibles fósiles. Hasta la fecha, las comunidades de fe han cumplido el mayor número de compromisos en el movimiento mundial de desinversión, con casi 400 compromisos en el total mundial de más de 1.200, según informan desde la fundación European Climate.
• Inclusión social: en el documento se dice que el mundo de las finanzas debe desempeñar su papel, apuntando a la "primacía del bien común" y trabajando para poner fin a la pobreza. "La pandemia de Covid-19 muestra cómo se cuestionan los elementos del sistema cuando se reduce el bienestar, se permite la especulación incluso en la desgracia y se oprime a los más pobres".
• Asistencia sanitaria: el texto califica la asistencia sanitaria como "una cuestión de equidad y justicia social" y reafirma la importancia del derecho a la asistencia. "A medida que las redes ecológicas se degradan, las redes sociales también se descomponen. En ambos casos, son los más pobres los que sufren las consecuencias".
Bill McKibben, fundador de 350.org, considera que este llamamiento del Vaticano es "una poderosa declaración de que intentar sacar provecho de la destrucción del planeta es simple y llanamente inmoral y poco ético".
Viaje hacia el cuidado de nuestro hogar común "es una fuerte declaración de que el Vaticano está apoyando el llamamiento de muchas instituciones, compañías, la juventud y otros grupos que ya mostraron que la única manera de reconstruir nuestras sociedades y economías es a través de una recuperación justa que se centre en las necesidades de la gente y no en los intereses corporativos de los grandes contaminadores, que nos llevaron a la crisis climática global que enfrentamos ahora", añade Yossi Cadan, director de la Campaña de Finanzas Mundiales de esta ONG.