La demanda de gas para el sector eléctrico en noviembre de 2011 fue de 7,63 teravatios hora, "lo que supone una disminución del 3.592% respecto al mismo mes del año anterior, debido principalmente al aumento de la generación con carbón y regímenes especiales" (no hay error tipográfico: 3.592%). Lo dice la Comisión Nacional de Energía de España (CNE) en la página diez de su último informe de "Supervisión del Mercado Mayorista de Gas" (el de noviembre). En ese mismo documento, la CNE señala además que el gas que llega a España de allende las fronteras es cada vez más caro. El informe dice exactamente (véase su página quince) que el coste de aprovisionamiento de gas natural en frontera española para el mes de noviembre de 2011 (26,72 €/MWh) acumula ya un incremento del 90% respecto al valor de julio de 2009 (14,03 €/MWh). Tampoco hay error tipográfico: incremento del 90% desde julio de 2009.
Costes "incrementados de forma insostenible"
La conclusión está muy clara. Las térmicas que queman gas para generar electricidad se hallan en una situación muy difícil: por la entrada masiva de energías renovables en el mix eléctrico (el kilovatio limpio, el renovable, tiene prioridad de vertido a la red eléctrica sobre el kilovatio de gas, emisor de CO2) y por el incremento brutal (ese 90%) de los precios de coste (la propia Aprie reconoce explícitamente, en el comunicado que acaba de difundir, que los costes que soporta "se han visto incrementados de forma insostenible"). El caso es que la asociación reclama ahora más dinero al gobierno. Y lo reclama a través de ese comunicado y con el pretexto de que "los pagos por capacidad no son suficientes para garantizar la viabilidad de determinados grupos". De hecho, estos pagos –añade Aprie–, "a pesar de la subida registrada en diciembre pasado, solo remuneran parcialmente las inversiones y los costes asociados al servicio de disponibilidad".
El pago por capacidad
Entiéndese por "pago por capacidad" (o pago por disponibilidad) el pago que establece el gobierno para que las centrales térmicas estén disponibles, a modo de respaldo, frente a determinadas contingencias. ¿Que qué tipo de contingencias? Pues, por ejemplo, un incremento no previsto de la demanda de electricidad o una significativa reducción de la oferta (no hay viento, la hidraulicidad es escasa y algún grupo nuclear hace una parada no programada, por ejemplo). Pues bien, el pasado nueve de marzo, la CNE publicó su informe sobre posibles medidas "dirigidas a atajar la evolución del déficit tarifario en el sector eléctrico", informe que le había encargado semanas antes el gobierno. En ese informe, la CNE propone eliminar "transitoriamente" el pago por disponibilidad "en tanto no se desarrolle la propuesta de metodología de pagos por capacidad en la que la CNE está trabajando en la actualidad".
Actividad en el mercado o prima
Pues bien, ayer, Aprie difundió un comunicado –el aquí mencionado– en el que critica esa propuesta que hace la CNE, propuesta que hace la Comisión para "atajar la evolución del déficit tarifario". Los recursos económicos que son destinados al pago por capacidad salen, precisamente, de la tarifa (como las primas de las renovables). El caso es que, en el comunicado ayer difundido, Aprie señala que, uno, no está de acuerdo con la propuesta CNE de eliminación "transitoria" de los pagos; dos, no está satisfecha con el incremento en el pago que estableciera el gobierno el pasado mes de diciembre (que solo atiende "parcialmente" a sus demandas); y tres, considera "de vital importancia" que el nuevo esquema incremente "las actuales cantidades asociadas a los pagos por capacidad para aquellas instalaciones que no pueden cubrir sus costes con los ingresos percibidos de su participación en el mercado de producción".
Aprie está montando ahora mismo 2.000 MW más de ciclo combinado
La reclamación no deja de ser llamativa, sobre todo, habida cuenta del cadáver de la prima renovable, aun caliente sobre la mesa. El caso es que Aprie, que no duda en reclamar una revisión al alza de su particular prima (el pago por capacidad), concluye su comunicado con un apunte muy directo a las otras primadas (o ex-primadas), las renovables: "es imprescindible –dice en su comunicado– acompasar el desarrollo de las renovables a la demanda energética real, evitando así incrementar la capacidad instalada si no se producen incrementos en la misma". Eso sí, la asociación nada dice de "acompasar" los 2.000 MW que tiene actualmente en desarrollo a esa "demanda energética real", y nada apunta –cuando de sus megavatios se trata– respecto a evitar incrementos de la capacidad instalada si no se producen incrementos en la demanda.