Fuera de esas zonas, el procedimiento no podrá llevar más de dieciocho meses, y, sobre todo, los Estados miembros deben evitar o, reducir al máximo, el impacto medioambiental negativo.El Parlamento Europeo ha votado esta mañana con 407 votos a favor, 34 en contra y 181 abstenciones, el proyecto de ley para aligerar el procedimiento para obtener permisos para plantas de producción de renovables, como paneles solares y molinos, o adaptar las existentes. En sus enmiendas a la propuesta de la Comisión, los eurodiputados acortaron el periodo máximo para la aprobación de nuevas instalaciones, de doce a nueve meses, si se sitúan en las llamadas 'áreas de aceleración de renovables'. Cada Estado determinará las suyas en función de su capacidad para avanzar en ese ámbito. Si la autoridad competente no responde en el plazo establecido, el permiso se considerará concedido, en aplicación del principio de 'silencio administrativo positivo'. Fuera de esas zonas, el procedimiento no podrá llevar más de dieciocho meses -en vez de los 24 meses de la propuesta inicial-. En cuanto a la adaptación de las plantas existentes para aumentar su potencia, los eurodiputados quieren que la concesión de permisos no tarde más de seis meses.
Al establecer las normas para la designación de zonas de aceleración de renovables, los Estados miembros deben evitar o, reducir al máximo, el impacto medioambiental negativo. Quedarán excluidos los lugares de la red Natura 2000, los parques y reservas naturales, así como las rutas migratorias de aves y mamíferos marinos, excepto las superficies artificiales y construidas, como tejados, aparcamientos o infraestructuras de transporte. Los eurodiputados también añadieron disposiciones para asegurar la consulta a la población antes de elegir el lugar para instalar una planta y para designar las zonas de aceleración.
Impulso de las instalaciones solares en los edificios
La propuesta también incluye la obligación de que los países de la UE garanticen que los permisos para instalar equipos de energía solar en edificios se entreguen en un plazo de tres meses. Para las instalaciones por debajo de 50 kW deberá bastar con la notificación. La instalación de equipos solares quedaría exenta de la obligación de evaluación de impacto ambiental previa, según decidieron los eurodiputados. Para la instalación de bombas de calor, el plazo de autorización no deberá rebasar un mes. Para llevar más energía renovable a la red sin demora, los eurodiputados también incorporaron elementos de una reciente propuesta de la Comisión presentada en el marco del 'procedimiento de urgencia', lo que permitirá que la mayoría de las disposiciones entren en vigor ya en 2023.
Oposición ecologista
Algunas asociaciones ecologistas como Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF se opusieron a que, "con la excusa de acelerar el despliegue en la energía renovable, se modifiquen las directivas claves para la conservación de la naturaleza", cuando el Parlamento Europeo anunció el debate y la posterior votación el pasado lunes. En un comunicado difundido ese mismo día, señalaban que es "innecesario" eliminar unilateralmente procedimientos de protección de la naturaleza en la concesión de permisos para acelerar el despliegue de las energías renovables. Esto, según informan los ecologistas, "generará un pernicioso precedente que pondrá en riesgo tanto las políticas de conservación de la naturaleza como las de lucha contra el cambio climático, además de afectar a la confianza de la ciudadanía hacia las instituciones europeas".