Defensa cerrada de la reforma del mercado eléctrico, en el marco de una situación excepcional (la actual), pero, al mismo tiempo, con un objetivo muy concreto en el horizonte: que el nuevo modelo sea apto para sortear futuras situaciones de estrés. La secretaria de estado de Energía, Sara Aagesen, ha defendido desde el minuto cero esa reforma, en la que ahora mismo está embarcada la Unión Europea, con ese horizonte concreto: evitar que futuras situaciones excepcionales coloquen a la Unión en la tesitura en la que ahora se encuentra, de crisis energética (de precios y de seguridad de suministro), crisis que en todo caso ya se venía perfilando. Esta es una reforma "que yo creo que desde hace tiempo todos sabíamos que tenía que llegar", porque este diseño de mercado "no está preparado para situaciones de estrés", ha dicho la secretaria de estado. La volatilidad que ha caracterizado el último trienio -ha añadido- "ha revelado muchas deficiencias, muchas vulnerabilidades (tanto energéticas como estratégicas). En los últimos tres años hemos vivido tiempos complicados que nos han llevado a una respuesta clara y contundente: tenemos que acelerar la transición energética por la crisis climática; tenemos que acelerar la transición energética como respuesta a la crisis sanitaria y la pandemia; y tenemos que acelerar la transición energética ante la crisis energética. Las tres cosas nos han llevado a la misma respuesta".
Y el objetivo de ese triple reto -climático, energético y económico- entraña también un fin social (o socio-económico, si se quiere): "precios asequibles que salvaguarden el bienestar de la sociedad y la competitividad de la Unión Europea".
Aagesen se ha remontado a los orígenes (el diseño del actual mercado eléctrico europeo data de finales del siglo pasado): "el sistema energético ha dado un giro claro de 180º, desde ese diseño de mercado, de 1998, cuando las renovables no gestionables eran testimoniales, y no se hablaba de energía fotovoltaica y energía eólica". Ahora, el sistema eléctrico europeo ha cambiado "de forma radical" y son precisamente las tecnologías renovables las protagonistas y las que se han constituido en una "palanca de oportunidad y de inversión aquí en España y también en Europa". Aagesen ha repasado exhaustiva los números: "en estos últimos cinco años la potencia instalada renovable ha crecido [en España] un 44%, la fotovoltaica se ha multiplicado por cuatro, la potencia eólica ha crecido un 28%". Son datos importantes -ha dicho- que requieren de "esa pieza fundamental" (el nuevo diseño de mercado eléctrico). "Nuestro actual modelo de fijación de precios, con ese origen en los años noventa -ha insistido Aagesen-, no es el adecuado para ese mix descarbonizado; y no es adecuado tampoco para situaciones de tensión".
Pero es que, además -ha añadido la secretaria de estado-, la electricidad tiene hoy un "carácter sistémico", y su impacto (el impacto de su precio) en la calidad de vida de todos y cada uno de los miembros de la sociedad, "particularmente los consumidores vulnerables", ha quedado muy evidenciado en esta situación de estrés máximo.
Sara Aagesen: "debemos tener un diseño de mercado acorde con ese mix energético. No estoy hablando de un diseño para dentro de 20 años. Lo necesitamos para el mix actual y para ese mix que esperamos ver, muy pronto. El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima establece que al menos el 74% sea generación eléctrica renovable en 2030, un Plan que está en revisión y que, como ya decía la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, llevaremos a más, a objetivos cada vez más ambiciosos. Necesitamos modernizar ese sistema bajo muchas premisas muy importantes: construir un sistema resiliente ante situaciones de estrés, proteger a los consumidores de forma estructural, inmediata y de forma sostenible en el tiempo; asegurar la competitividad de las empresas (por eso es tan importante que esa reforma sea lo antes posible). También necesitamos señales para ese futuro: hay que facilitar la entrada de figuras para dar seguridad energética: almacenamiento, gestión de la demanda... Necesitamos contar con mecanismos de capacidad. Pero todo esto solo es posible si tenemos a la sociedad de la mano. Por eso hay que anticipar los beneficios de esa transición, de ese mix energético cada vez más renovable, a todos y cada uno de los consumidores, con precios más asequibles, más cercanos a los costes de generación"
La secretaria de estado ha asegurado, durante su intervención en el Club Español de la Energía, que "la propuesta de la Comisión [propuesta de reforma del mercado eléctrico] comparte tanto el análisis, el diagnóstico que presentamos a principios de año, como los objetivos: colocar la defensa de los intereses de los consumidores, de la industria y de las empresas en el centro de esa transformación; reducir el impacto del precio del gas en el recibo; y trasladar el bajo coste de las renovables a todos los consumidores".
Mercados a plazo y de capacidad
Las soluciones que ha defendido Aagesen, y que comparte con la Comisión, son (1) mantener elementos que funcionan, "como los mercados a corto plazo, mercados transparentes y líquidos, que son eficaces para dar señal de precio cada hora"; y (2) fomentar los mercados de plazo de energía y de capacidad: "necesitamos mecanismos de mercado, como los contratos por diferencias y también los contratos de compraventa de energía" (Power Purchase Agreements, PPAs).
"Pero hay que ir más allá -ha añadido-; el modelo renovable necesita robustez, necesita firmeza, y por eso los mecanismos de capacidad son fundamentales".
Sara Aagesen: "los necesitamos. Los hemos solicitado y no deberían ser un instrumento de último recurso. Es más: necesitamos que en esta reforma del mercado se haga un planteamiento mucho más racional de todo el procedimiento de aprobación en los mecanismos de capacidad. El que existe ahora no funciona. Es un procedimiento extraordinariamente largo y complicado. Y eso no funciona. No funciona en una transición que está acelerada. Tenemos que disponer de instrumentos de activación rápida ante situaciones de estrés"
La secretaria de estado ha abogado en todo momento por plantear frente a los problemas "una respuesta rápida y unida por parte de la Unión Europea, justa y equitativa".
"Quedan por delante -ha destacado- unos meses intensos y con un objetivo claro y contundente por parte de Europa y por parte de esta presidencia del Consejo de Europa que va a ostentar España, y es conseguir que ese diseño del mercado se pueda cerrar antes de final de 2023".
El eurodiputado socialista Nicolás González Casares es el ponente de la propuesta de reforma del mercado eléctrico europeo. Con él -"es muy importante el trabajo que está haciendo desde el Parlamento Europeo"- ha cerrado su intervención Aagesen: "bajo la presidencia española vamos a tener muchísimos debates, muy intensos, un debate institucional, entre la Comisión, el Consejo y el Parlamento. Trabajaremos en esos trílogos con distintos enfoques y distintas sensibilidades, pero con un objetivo común: llegar a un gran acuerdo", lo que constituye -ha concluido la secretaria de estado-, "una prioridad estratégica para España, pero yo también diría que estratégica para Europa, para la transición energética y para la competitividad de nuestros hogares y de nuestras industrias".
El próximo día 19 hay un Consejo Europeo de Ministros de Energía.