El Gobierno ha dado luz verde a otros 244 millones de euros en ayudas para la industria electrointensiva (siderúrgicas, cementeras, químicas y otras industrias grandes consumidoras de energía). En 2021 el Ejecutivo adjudicó 179 millones de euros por este concepto, de los que se beneficiaron 170 empresas. En la convocatoria de este año se han incrementado así las ayudas un 36% respecto al año pasado, "alcanzando el nivel máximo -explica el Gobierno- autorizado por la Comisión Europea".
Reyes Maroto, ministra de Industria, Comercio y Turismo: “estas ayudas muestran el compromiso del Gobierno con los sectores industriales electrointensivos y permiten mejorar su competitividad, reforzar sus capacidades industriales y el empleo. La incertidumbre provocada por la guerra está generando tensiones en las cadenas de valor a nivel mundial y un encarecimiento de los precios energéticos que están afectado a la industria y para garantizar su competitividad desde el Gobierno hemos aprobado un paquete de medidas de apoyo a los sectores industriales afectados para garantizar un precio de energía competitivo por un importe cercano a los 500 millones de euros”
La Comisión Europea permite a cada Estado miembro compensar los costes indirectos de las industrias de determinados sectores o subsectores a los que se considera expuestos a un riesgo significativo de “fuga de carbono”, debido a los costes relacionados con las emisiones de gases de efecto invernadero repercutidos en los precios de la electricidad.
Estas ayudas vienen a complementar todo un paquete de apoyo energético a la gran industria, como la compensación de los cargos de la factura eléctrica destinados a la financiación de la retribución específica a renovables y cogeneración de alta eficiencia y por la financiación adicional en los territorios no peninsulares. El importe máximo autorizado es de 73,6 millones de euros.
También se aprobó hace unas semanas ayudas directas a empresas gasintensivas, por un valor de 125 millones de euros. Y la aplicación de un mecanismo de reducción en la factura eléctrica del 80% del coste correspondiente a los peajes de acceso a las redes de transporte y distribución de electricidad. Esta medida tiene un coste de 225 millones de euros.
En total, 488 millones de euros destinados a mejorar la competitividad de los sectores industriales de gran consumo energético.