EOS-X Space, que se presenta como la "primera compañía de exploración espacial europea", tiene sus raíces repartidas por Abu Dabi, país de nacimiento de su fundador y director ejecutivo, Kemel Kharbachi, y Sevilla, ciudad por la que la empresa ha hecho una apuesta inequívoca, pues en ella instalará su ambicioso SpaceHub Complex, y en ella misma ultima el desarrollo de las cápsulas tripuladas Spaceship One, pendientes aún de las pruebas de validación, que tendrán lugar próximamente, y en las que va a participar el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial de España (INTA). El objetivo de estos últimos prolegómenos es -informa la empresa- empezar la operativa de los vuelos "tanto en Sevilla, sede de la compañía en España, como en Abu Dabi, en torno al tercer trimestre de 2025". La compañía de Kharbachi declara una inversión en ambos países de más de 230 millones de dólares en ingeniería y desarrollo. La empresa además se encuentra actualmente en medio de una ronda de inversión, serie D, de 115 millones de euros, liderada por el banco de inversiones norteamericano FTI Capital Advisor.
Cápsula eco
El proyecto, que presume de su condición de "pionero tanto en España como en Europa", arrancó hace apenas cuatro años, en 2020, y presenta importantes diferencias respecto a las propuestas de otras empresas. A saber: mientras que otras firmas -explican desde la compañía de Kharbachi- ofertan vuelos en cohetes a precios que rondan el millón de dólares, "por una experiencia de muy corta duración", y que además exigen "un entrenamiento complejo y un estado físico óptimo"; las cápsulas presurizadas de EOS-X Space son propulsadas por un globo de helio no contaminante y van a permitir a los turistas espaciales disfrutar "de unas soberbias vistas de la oscuridad del espacio, el halo azul y de la curvatura de la Tierra durante un viaje de cinco horas, frente a los 11 minutos que dura, por ejemplo, el vuelo del cohete de la compañía Blue Origins". El viaje en la cápsula Spaceship One, además, no exige de una ardua preparación, según la empresa, y viene "acompañado -añaden desde EOS- del disfrute de un programa personalizado, de una semana de duración, con experiencias culturales, gastronómicas y de medicina regenerativa y bienestar".
El precio por pasajero oscilará, en función de las alternativas contratadas, entre los 150.000 y los 200.000 euros.
Kemel Kharbachi, fundador y CEO: "el desarrollo del turismo espacial ofrece unas perspectivas de inversión tan amplias y prometedoras como la curiosidad del ser humano. Llegará un momento, como ha sucedido con las compañías aéreas, en las que esta manera de conocer el mundo será mucho más accesible. No obstante, actualmente trabajamos en lo que es un producto de ultralujo que está dirigido a un tipo de usuario final muy concreto, el de las comunidades HNW, con una población de unos 20 millones de clientes potenciales a nivel global, y en franca expansión: son los llamados ultrarricos. Los precios de nuestros servicios también suscitarán el interés de personas adineradas que, aunque no lleguen a esos niveles de ingresos, sí pueden destinar una cifra de entre 150.000 y 200.000 euros para vivir una experiencia totalmente incomparable"
EOS-X Space ofertará en su sede española (la Isla de la Cartuja) todo un complejo espacial -SpaceHub Complex- en el que la compañía va a desarrollar "experiencias inmersivas" y en el que se ubicarán (1) el centro de control de las misiones espaciales; (2) áreas de entrenamientos microgravity (que en principio solo estarán a disposición de los turistas espaciales pero que la empresa prevé abrir al público en un futuro); y (3) un "hotel de ultralujo" en el que los clientes -informa la empresa- disfrutarán de "pioneros tratamientos de medicina regenerativa, nutrición, bienestar y diferentes experiencias culturales y gastronómicas".
Turismo espacial
La compañía de Kemel Kharbachi estima en 9.000 millones de dólares el mercado potencial del turismo espacial y espera "una fuerte rentabilidad desde el primer año de operaciones" y un crecimiento de sus ingresos del 220% en cinco años. En concreto, Kharbachi y el equipo directivo calculan que en el año de su lanzamiento, 2025, "los ingresos conjuntos en España y Abu Dabi podrán alcanzar los 353 millones de dólares, lo que supondrá un beneficio bruto del 19%, de manera que en 2029 la compañía consiga una facturación de 1.127 millones de dólares y un beneficio bruto de 324 millones de dólares, con un crecimiento del beneficio del 23,3% en su quinto año con respecto al anterior". En total -adelantan en la empresa-, el aumento de los beneficios supondría un incremento del 220 % entre 2025 y 2029.