El director de Supercable, Xavier Obradors, profesor del Instituto de Ciencia de Materiales de Barcelona (CSIC), asegura que “el proyecto es imprescindible porque el sistema eléctrico actual, del que dependemos hasta niveles insospechados, no podrá cumplir con la demanda. Un ejemplo reciente es el problema de suministro que sufre Barcelona, cuyas redes energéticas actuales son insuficientes. No es el primer caso: en 2003, la falta de suministro eléctrico en EEUU afectó a cuarenta millones de personas y causó más de mil millones de dólares en pérdidas”.
El nuevo modelo de cable empleará el nivel de corriente más alto utilizado hasta la fecha, 3200 amperios de valor efectivo de corriente, frente a los 600 amperios actuales. Con los nuevos sistemas superconductores, asegura Obradors, "el sistema eléctrico en su conjunto será más seguro, eficiente y limpio porque los transformadores serán ignífugos y se utilizarán limitadores de corriente para evitar la desconexión en cadena de transformadores y generadores".
Obradors destaca, asimismo, que los futuros supercables "facilitarán la inclusión de energías renovables con acumuladores de energía electromagnéticos, que servirán de tapón energético momentáneo durante los aumentos puntuales de la demanda eléctrica”. Según el CSIC, el primer sistema superconductor estará disponible en un par de años. El proyecto del equipo de Obradors ha recibido el premio Novare 2007 de eficiencia energética que concede Endesa, dotado con 500.000 euros y dirigido a financiar la investigación.
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