“Hoy anunciamos que el Banco Mundial no financiará a contracorriente el gas y el petróleo después de 2019”, explicó ayer en París el presidente de la institución, Jim Yong Kim, durante la cumbre. Yong Kim indicó, no obstante, que podrían darse excepciones en el caso de los países en vías de desarrollo con necesidades específicas en energía. “Todavía dejamos abierta la posibilidad de que en circunstancias excepcionales los países más pobres necesiten ayuda, pero la política cambiará drásticamente”, puntualizó.
Con esta iniciativa, que ha sido aplaudida por Greenpeace y otras ONGs mundiales, la institución financiera internacional busca que las ayudas que otorga a los Estados se ajusten a los objetivos del Acuerdo de París de 2015 para limitar el calentamiento global.
“Estamos determinados a trabajar con todos ustedes para implementar las políticas adecuadas, lograr que las fuerzas del mercado se muevan en la dirección correcta, poner dinero sobre la mesa y acelerar nuestra acción”, añadió Jim Yong Kim.
El presidente del Banco Mundial también anunció que el organismo está “en camino de cumplir su objetivo de que el 28% de sus préstamos para 2020 se destinen a la acción climática”. La institución se ha comprometido a informar anualmente, desde finales de 2018, sobre las emisiones de gases de efecto invernadero de los proyectos de inversión que financia en sectores clave, como el energético.
En 2016, el Banco Mundial financió a la industria petrolera y del gas con casi 1.600 millones de dólares, un porcentaje que representa algo menos del 5% del total de los financiamientos acordados este año.
“Hay que trabajar en favor de la gente y del planeta”
Tras aplaudir la iniciativa del Banco Mundial, el secretario general de la ONU, António Guterres, destacó, por su parte, que “el mundo de las finanzas es un factor decisivo para ganar el combate contra el cambio climático, por lo que “hay que asegurarse de que trabaja en favor tanto de los beneficios como de la gente y el planeta”.
“No tenemos que esperar a quedarnos sin carbón y petróleo para acabar con los combustibles fósiles. Necesitamos invertir en el futuro, no en el pasado”, subrayó Guterres. El sector energético es responsable de tres cuartas partes de las emisiones de gases de efecto invernadero, recordó, por lo que instó a los países y las entidades crediticias a aumentar los esfuerzos financieros y estatales contra el cambio climático, advirtiendo que la guerra contra el calentamiento global “no está ganada”.