El presidente del ICOG, Luis Suárez (foto), ha sido muy explícito: la central japonesa de Fukushima –ha dicho– está en una ubicación "inadecuada". Suárez ha añadido que, "cuando se construyó la central en los años 70, todavía no se había formulado la teoría de Wegener sobre tectónica de placas y no se tenían los conocimientos geológicos y de riesgo sísmico de los que disponemos ahora". La central nuclear de Fukushima Daiichi está formada por un total de seis reactores construidos entre 1971 y 1979 y, según Nuclenor, empresa propietaria de Garoña, tiene "la peculiaridad de que la unidad 1 tiene el mismo diseño que Garoña e incluso se puso en funcionamiento en el mismo mes y año, por lo que se la considera una planta hermana".
Según el ICOG, la ubicación de las centrales nucleares españolas también se decidió en los años 70 a partir de estudios geológicos llevados a cabo por la empresa nacional Adaro de investigaciones mineras. A la luz de esos estudios, señala Suárez, se descartó, por ejemplo, la construcción de una central en Rodalquilar, Almería, "por encontrarse próxima a una zona de riesgo sísmico activo". Según las estadísticas que maneja el Colegio de Geólogos, España registra un gran terremoto destructivo cada 70 años. El sur de la Península Ibérica, que se encuentra sobre un área de subducción entre la placa Euroasiática y la placa Africana, estando en medio la placa del Mar de Alborán, concentra –añade Suárez– "el mayor índice de terremotos".
Según el Colegio Oficial de Geólogos, "concretamente las zonas de mayor riesgo son las provincias de Málaga, Almería, Granada y Murcia, aunque también el Pirineo, entre Navarra y Huesca". El último terremoto de gran intensidad se produjo el 25 de diciembre de 1884 en Arenas del Rey (Granada), con una magnitud de entre 6,5 y 6,7 grados en la escala Richter. En aquella ocasión, y siempre según los datos del ICOG, murieron 900 personas, 2.000 resultaron heridas y se destruyeron más de un millar de casas. Murcia, que es una de las "zonas de mayor riesgo" se halla a unos 150 kilómetros de distancia de la central nuclear de Cofrentes, en la Comunidad Valenciana. El epicentro del seísmo registrado en Japón se localiza a unos 130 kilómetros de la costa.
El presidente de los geólogos de España asegura en todo caso que "no se ha producido ningún terremoto de magnitud 6 ó mayor en las áreas en las que están ubicadas [las centrales nucleares españolas]". Aún así, el presidente del ICOG, ante la posibilidad de prolongar la vida útil de las centrales nucleares, aboga por "actualizar y renovar" los estudios geológicos, sísmicos y de posibles fallas activas, ya que "actualmente contamos con tecnologías más precisas para evaluar la peligrosidad sísmica de una zona determinada".
Más información
www.icog.es