El pasado 6 de agosto concluía el plazo para que los adjudicatarios acreditasen al Ministerio que contaban con autorización administrativa para construir las instalaciones renovables que se les habían adjudicado en la mencionada subasta. Es el último trámite del proceso de adjudicación, que arrancó en agosto de 2017, con la publicación en el Boletín Oficial del Estado, y que prosiguió con la identificación de las instalaciones por parte de los adjudicatarios, que fueron entregadas el pasado mes de febrero.
A partir de este momento, los adjudicatarios que cuenten con una resolución favorable tienen hasta el 31 de diciembre de 2019 para que las instalaciones sean construidas y entren en funcionamiento.
La subasta realizó adjudicaciones para cubrir con energías renovables una potencia total 3.000 MW, aunque permitía a los adjudicatarios identificar posibles instalaciones hasta con un 50% más de la potencia inicialmente adjudicada. Según señalan desde el Ministerio, de esta manera se ofrecía mayor flexibilidad durante el proceso de tramitación, permitiendo a los adjudicatarios hacer frente a los posibles obstáculos o incidencias que pudieran surgir durante la tramitación.
La subasta distribuyó los 3.000 MW de la siguiente forma: 2.979,65 MW en instalaciones eólicas, 1,10 MW en soluciones fotovoltaicas y 18,83 MW en otras tecnologías renovables. Tras haber concluido satisfactoriamente la tramitación, las 86 instalaciones que ya cuentan con vía libre para su construcción y puesta en funcionamiento son:
Queda pendiente este mismo trámite para la segunda subasta celebrada en 2017 de 5.036,92 MW. La fecha límite para acreditar ante el Ministerio que se dispone de autorización administrativa de construcción es el próximo 15 de octubre. La puesta en funcionamiento de las instalaciones, al igual que la subasta previa, debe producirse antes del 31 de diciembre de 2019.