Los barrios afectados son Cañada Real (en Madrid), Distrito Norte (en Granada), Font de la Pólvora (en Girona), El Puche, la Chanca y El Quemadero (en Almería), Sant Roc (en Badalona) y Polígono Sur (en Sevilla), todos los cuales -denuncia la Fundación- sufren desde hace meses, "y, en algunos casos, años, persistentes interrupciones de suministro eléctrico que imposibilitan que puedan tener unas condiciones de vida dignas". Según Savia, el problema "resulta especialmente preocupante en el caso de la infancia y de aquellas personas que padecen algún tipo de enfermedad que requiere de suministro eléctrico continuo para tratar sus dolencias”. A pesar de ello, la respuesta de las administraciones públicas -continúa la Fundación- ha sido de "indiferencia o criminalización, vinculando estos cortes de luz con la producción de marihuana [caso de Cañada Real]". La Fundación alerta en ese sentido contra la aporofobia (el odio a los pobres), hace un llamamiento a la "responsabilidad institucional" para tratar el asunto con un enfoque "más veraz y respetuoso con la dignidad de todos" y recuerda por fin que "distintos expertos en derechos humanos de Naciones Unidas han afirmado que la falta de electricidad no sólo viola el derecho de la infancia a una vivienda adecuada, sino que tiene un efecto muy grave en sus derechos a la salud, a la alimentación, al agua, al saneamiento y a la educación”.
La Fundación Savia se ha sumado al más de un centenar de organizaciones que han solicitado al gobierno central que “asegure el suministro de electricidad a todas aquellas familias que se ven afectadas por las interrupciones de suministro eléctrico y que cuide por que las administraciones públicas no emitan mensajes estigmatizadores hacia quienes sufren las consecuencias de los cortes de electricidad”.
La Fundación Savia nació en 2014 "con vocación de servicio hacia un compromiso en la defensa de valores en el entorno rural, promoviendo y cooperando en el desarrollo social, económico, patrimonial, paisajístico y cultural, y mejorando la calidad de las personas que viven en él, así como propiciando el progreso y la defensa del sector ecológico". La Fundación Savia se define como "una entidad sin ánimo de lucro de ámbito nacional en España que tiene como objetivo poner en valor lo rural".
Su presidente es Francisco Casero, que fue presidente de la Asociación Valor Ecológico-CAAE (Ecovalia), Fundador del Sindicato de Obreros del Campo, creador de la Confederación Ecológica Pacifista Andaluza, responsable de la Comisión Agroforestal, miembro del Consejo Forestal Andaluz, miembro fundador de la Asociación empresarial “Andalucía Sostenible”, creador de la “Mesa Estatal de Agricultura y Ganadería Ecológica”, Consejero de Honor de la Cooperativa COATO de Murcia e Hijo Predilecto de Almonte