Más de diez personas han sido detenidas y llamadas a declarar este miércoles ante la Policía Nacional, en distintas ciudades, por la acción de desobediencia civil no violenta llevada a cabo frente al Congreso de los Diputados el pasado 6 de abril, según ha comunicado Rebelión Científica (Scientist Rebellion Spain) y ha difundido Ágora. Ese día, integrantes de la comunidad científica y académica de toda España se reunieron en Madrid frente a la Cámara Baja para arrojar sangre falsa y biodegradable sobre el edificio, con el fin de llamar la atención y denunciar la inacción de las autoridades frente a la crisis climática y ecológica.
La actividad se enmarcó dentro de la semana de acciones en más de 25 países del movimiento Rebelión Científica / Scientist Rebellion. Las personas investigadas -informan desde el movimiento- han sido imputadas "por delito de daños a un edificio singular protegido y delito de daños a las instituciones del Estado por alterar de forma notoria la sesión que se estaba realizando en el Congreso de los Diputados". Tras las detenciones, los miembros de la comunidad científica han sido puestos en libertad con cargos.
Rebelión Científica añade también que la sangre falsa y biodegradable, realizada a base de agua y remolacha, no ocasionó daños materiales y fue retirada por los servicios de limpieza en cuestión de minutos, "a pesar de la impugnación policial que cifra los daños en el edificio por valor de 3.306,69 euros". Las personas imputadas niegan la veracidad de las acusaciones y afirman que "la acción transcurrió de manera pacífica y no impidió el desarrollo de la actividad parlamentaria". Además, en alusión a las acusaciones realizadas añaden que "la falta de acción política ante la crisis climática, de manera urgente y contundente, está alternado de forma notoria el clima y la vida de las generaciones presentes y futuras".