El Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado un Programa Temporal de Empleo “para dar un impulso -informa el Ejecutivo regional- a los expedientes relacionados con la transición energética”. La portavoz del Gobierno castellano-manchego, Blanca Fernández, ha explicado ante los medios que “de lo que se trata es de atraer inversiones empresariales que, cumpliendo con los objetivos de sostenibilidad económica, social, medioambiental y territorial, contribuyan a favorecer la actividad económica”. Según el Ejecutivo que preside el socialista Emiliano García-Page, el objetivo último de ese Programa Temporal de Empleo es dar un “impulso significativo a los expedientes relacionados con la transición energética y con otras tramitaciones medioambientales”. El Gobierno regional ha especificado que contratará 34 profesionales “expertos en Derecho, Montes, Ciencias Ambientales, Biología, Veterinaria, Técnicos Industriales y Técnicos Forestales” que se encargarán “de un amplio abanico de tareas”, como asesoramiento jurídico, realización de informes, coordinación de propuestas, etc. La portavoz del Ejecutivo castellano-manchego ha explicado que esta medida se enmarca “en el compromiso del Gobierno del presidente García-Page por impulsar aún más si cabe los proyectos ligados a energías limpias y renovables, lo que pasa, en parte, por agilizar los procedimientos administrativos con un equipo dedicado a ello de manera exclusiva”.
825 megavatios instalados en 2019
Según el Gobierno regional, Castilla-La Mancha cerró 2019 con 9.000 megavatios de capacidad de generación de electricidad instalados, 6.700 de ellos de origen renovable y 825, instalados en 2019. La actividad desarrollada por el sector el curso pasado “ha llevado aparejada en el último año -informa el Gobierno- una inversión estimada cercana a los 455 millones de euros, la creación de más de 1.000 empleos y la generación de energía limpia para abastecer a 165.000 hogares aproximadamente, evitando además la emisión de 530.000 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera”.
Según la portavoz del Ejecutivo castellano-manchego, ahora mismo, la Administración regional “está tramitando numerosas propuestas de instalaciones de energías renovables que supondrán una inversión privada de 6.000 millones de euros y la creación de 8.400 puestos de trabajo directos durante la construcción, a los que hay que sumar 500 empleos para el mantenimiento y la gestión de todas estas infraestructuras”. Más concretamente, ahora mismo hay en la región en tramitación -informa el Gobierno de Page- proyectos fotovoltaicos y eólicos que suman 3.108 MW, con la siguiente distribución provincial: Albacete, 736; Ciudad Real, 785; Cuenca, 540; Guadalajara, 310; y Toledo, 737, “sin olvidar -añaden desde el Ejecutivo regional- que se ha solicitado la instalación de otros 4.800 megavatios al Gobierno de España”. El objetivo 2030 que se ha propuesto el Ejecutivo regional en todo caso es “alcanzar una potencia instalada cercana a los 18.000 megavatios”.
En este sentido -ha matizado la portavoz del Gobierno de Page-, “hemos solicitado a Red Eléctrica, y, por tanto, al Ministerio para la Transición Ecológica, la ampliación de la capacidad de evacuación de energía por el alto número proyectos renovables existentes en Castilla-La Mancha”.