La Eurocámara ha aprobado hoy mismo la reforma del régimen de comercio de derechos de emisión (RCDE) haciéndolo mucho más ambicioso, ya que las emisiones deberán reducirse, a más tardar en 2030, en un 62 % en comparación con los niveles de 2005. También elimina gradualmente los derechos de emisión gratuitos de las empresas a partir de 2026 y hasta 2034, y crea un nuevo RCDE II independiente, dedicado al combustible para el transporte por carretera y a la construcción, que pondrá un precio a las emisiones de GEI de estos sectores en 2027 (o 2028 si los precios de la energía son excepcionalmente altos). Esta reforma también incluye, por primera vez, las emisiones de GEI del sector marítimo, así como la revisión del RCDE para el sector de la aviación con la que se eliminarán gradualmente los derechos de emisión gratuitos para el sector de la aviación en 2026 a más tardar, y se fomentará el uso de combustibles sostenibles en dicho sector.
También se ha aprobado el Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono, cuyo objetivo es incentivar a terceros países para que eleven la ambición de sus objetivos climáticos y garantizar que los esfuerzos climáticos de la UE y mundiales no se vean socavados por la deslocalización de la producción desde la UE a países con políticas menos ambiciosas. Los productos a los que se aplica el Mecanismo de Ajuste son el hierro, el acero, el cemento, el aluminio, los fertilizantes, la electricidad y el hidrógeno, así como las emisiones indirectas en ciertas circunstancias. Los importadores de estos productos tendrían que pagar la diferencia entre el precio del carbono pagado en el país de producción y el precio de los derechos de emisión de carbono en el RCDE. El nuevo Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono se introducirá progresivamente a partir de 2026 hasta 2034, al mismo ritmo que se eliminan los derechos de emisión gratuitos en el RCDE.
Por su parte, los Estados miembros han acordado crear un Fondo Social de la UE para el Clima en 2026, que garantizará una transición climática justa y socialmente inclusiva. Se verán beneficiadas las familias vulnerables, las microempresas y los usuarios del transporte afectados por la pobreza energética y de transporte. Una vez plenamente en vigor, el Fondo Social para el Clima se financiará subastando derechos de emisión del RCDE II hasta un importe de 65 000 millones de euros. El 25 % restante procederá de recursos nacionales (el total estimado será de 86 700 millones de euros).