En principio, en el mencionado discurso, en un momento determinado, AMLO, como se lo conoce al ahora presidente mexicano -y de quien en octubre pasado ya hemos dado algunas claves que pueden marcar su mandato en un artículo titulado El enigma López Obrador-, se refirió a que una de sus primeras medidas será recuperar la producción de petróleo, que según su punto de vista se ha visto mermada durante la presidencia del saliente Enrique Peña Nieto.
En ese sentido llamó "a rescatar Pemex como lo hizo el general Lázaro Cárdenas en 1938". La referencia es un hecho clave en la historia de México, cuando el entonces presidente Cárdenas expropió los bienes de las compañías petroleras y creó la empresa estatal Petróleos Mexicanos (Pemex). Tras la reforma energética de 2013, la explotación petrolera quedó por fuera del monopolio de dicha empresa estatal y comenzó una liberalización del mercado de la energía y el ingreso de nuevos actores en ese escenario, un territorio hasta entonces vedado para esas cuestiones.
La única mención a las renovables
En el párrafo destinado a otras fuentes de energía, aparte del petróleo, esto dijo AMLO:
"Se detendrá el plan de desmantelamiento de la Comisión Federal de Electricidad. Ni una planta (eléctrica) más será cerrada, por el contrario, se modernizarán las existentes y se les darán atención especial a las hidroeléctricas para producir más energía limpia y de menor costo, impulsaremos el desarrollo de fuentes de energía alternativas renovables como la eólica, la solar, la geotérmica..."
Como ya se anticipó en el artículo antes referido, algunos puntos del programa con el que el nuevo gobierno se presentó a las elecciones especificaban: en el punto 21, se menciona el “Aumento de la producción de petróleo y gas con el fortalecimiento de Pemex”; en el 22, “Modernización de las seis refinerías existentes”; 23, “Construcción de una refinería en Dos Bocas, Paraíso, Tabasco”; y 24, “Desarrollo de la infraestructura eléctrica y energías alternativas con el impulso a la CFE”.
Licitación de renovables suspendida
El lunes pasado el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) dio a conocer un comunicado en el que se anunciaba "a los Interesados, Compradores Potenciales y Licitantes, la suspensión de la Primera Subasta de Largo Plazo 2018", amparándose en cuestiones específicas del Manual de Subastas de Largo Plazo, "por instrucción de la Presidencia de la República" y "derivado del cambio administración en la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la Secretaría de Energía y el Centro Nacional de Control de Energía mientras se realiza una revisión de los objetivos y alcances". "Una vez finalizada la revisión mencionada por parte de las entidades involucradas se realizará la notificación de reactivación", se agrega.
Según fuentes del sector energético citadas por la agencia EFE, podrían pasar hasta dos meses para fijar nueva fecha; de no hacerse, la licitación quedaría cancelada.
La filial de la española Iberdrola en el país (cuyo accionar allí representa el 6 % del total global de la energética) hizo saber a través de un comunicado que ve "razonable" y "normal" la suspensión.
El gobierno saliente había marcado como meta alcanzar para 2024 un 35 % de generación proveniente de fuentes renovables. Según datos oficiales, en marzo de 2016 se realizó la primera subasta privada para proyectos de esas energías, con 1,7 GW colocados. A esa la siguió una segunda, en septiembre del mismo año, con 2,9 GW. Finalmente, con la realizada en noviembre del año pasado, casi 7 GW renovables se han adjudicado en total de esta manera.
