No menos importante es que se especifica que las empresas que reinviertan dividendos o utilidades en un nuevo proyecto de infraestructura en el país serán eximidas de los impuestos anejos.
Días pasados, el subsecretario de Energías Renovables, Sebastián Kind, había explicado ante inversores estadounidenses, parte de una comitiva que acompañó al presidente Barack Obama en su visita al país, que la reglamentación significaría "un shock de medidas" para fomentar las renovables.
El decreto 531 del Poder Ejecutivo (que se puede consultar aquí), fija que los recursos del Foder, hasta ahora con 12 mil millones de pesos (poco más de 800 mil dólares) aportados por el Estado, estarán en función de las metas anuales fijadas para la participación de las energías renovables, y serán de al menos el 50% del ahorro efectivo en la compra de combustibles fósiles.
También serán premiados aquellos proyectos que contengan mayor porcentaje de integración del componente nacional.
Así, las empresas beneficiarias del régimen descrito en el decreto, podrán obtener la devolución anticipada del IVA, correspondiente a los bienes nuevos incluidos en el proyecto, y en forma simultánea, gozarán de la amortización acelerada del Impuesto a las Ganancias.
Adicionalmente, las empresas que tengan proyectos de energías renovables y compren un 30% de los equipos en el país recibirán un bono fiscal por el 20% del gasto, y que, además de servir para abonar impuestos nacionales, será transferible. Los beneficios impositivos -a los que se agregan excepciones a los aranceles de importación- serán decrecientes, es decir que los proyectos que se presenten antes tendrán más ventajas.