Para la asociación, que integra la mayoría de las tecnologías renovables, es lamentable que desde la Secretaría de Estado de Energía se hable ahora del consenso necesario para definir el futuro mix energético de nuestro país y haga una propuesta de subastas de instalaciones renovables de espaldas al sector, con el que no ha mantenido ningún tipo de interlocución al respecto, algo que, por otra parte, ha venido siendo la norma habitual.
Como ha publicado ER, la propuesta del Ministerio, dice APPA, “no se corresponde siquiera con sus propias previsiones incluidas en el documento de planificación de infraestructuras eléctricas, donde ya se reconoce que es necesario desarrollar nuevas inversiones renovables para cumplir con los objetivos obligatorios para 2020”.
Se prevé que en los próximos cinco años las renovables aumenten su potencia instalada en unos 8.500 MW, y desde APPA “no se entiende que tras esa previsión el Ministerio saque a subasta solamente 700 MW, 500 de ellos eólicos y 200 de biomasa, y deje fuera otras tecnologías como la minihidráulica y la fotovoltaica”.
Para APPA, será difícil que se cubran las subastas pues se basan en el mismo modelo de inseguridad jurídica que ha ahuyentado a los inversores del sector renovable español. La propuesta, según la asociación, más parece una operación de imagen cara a Bruselas y a la opinión pública, con el mensaje de que el Gobierno levanta la moratoria renovable, cuando de momento no es así.
“Las condiciones poco realistas de las subastas y los plazos que contempla la Ley de Sector Eléctrico harán difícil que se materialicen los proyectos, para los que será poco menos que imposible conseguir algún tipo de financiación”, añade.
APPA vuelve a reclamar una regulación que dé estabilidad al sector de renovables, con el objetivo de que España cumpla con sus compromisos europeos en materia energética y que nuestro país apueste de forma decidida por las tecnologías renovables, que se han convertido ya en la opción más rentable, segura y limpia de generación eléctrica.