Amigos de la Tierra difundió ayer un comunicado en el que explica que "celebra" la aprobación de una ley de estas características, pero considera que el Gobierno "está perdiendo una oportunidad para enfrentarse a la emergencia climática con un texto excesivamente flojo". Según la responsable de Justicia Climática y Energía de esta organización ecologista, Cristina Alonso Saavedra, la Ley que aprobó ayer el Congreso es una ley "que está muy por debajo de las necesidades estatales e internacionales marcadas por la ciencia para evitar las peores consecuencias de la crisis ecosocial". Alonso Saavedra incide particularmente en el hecho de que el texto "no contempla la responsabilidad histórica de España frente a los países del Sur Global, territorios y comunidades más vulnerables, que están sufriendo los impactos de la emergencia climática sin tener apenas responsabilidad sobre ella".
Cristina Alonso Saavedra, responsable de Justicia Climática y Energía de Amigos de la Tierra: “la reducción de emisiones fijadas en un 23% para 2030 nace obsoleta y es insolidaria. Necesitamos apostar por una reducción de un 55%. Si no, corremos el riesgo de alcanzar una temperatura de +3ºC sobre los niveles preindustriales, lo que nos podría llevar a un cambio climático sin retorno. Es indispensable que el Gobierno esté a la altura de las circunstancias; para esto, debe recapacitar e incrementar el objetivo de acuerdo a las recomendaciones científicas y las demandas ciudadanas”
Amigos de la Tierra apuesta en ese sentido por incrementar la ambición climática. La oenegé ecologista propone así un sistema eléctrico cien por cien renovable para el año 2030 (la ley fija un 74%) y propone por otro lado alcanzar el 100% de energías de origen renovable en el consumo de energía final para el año 2040 (la Ley propone la neutralidad climática en 2050). Los ecologistas consideran también clave establecer "objetivos vinculantes" de participación ciudadana. "La falta de estos últimos está dando lugar a la proliferación de megaproyectos liderados por las grandes empresas energéticas, lo que ya está causando impactos ambientales y sociales y generando gran oposición en muchos territorios”, señalan desde esta organización no gubernamental.
Los datos oficiales sobre el mix eléctrico -explican desde la oenegé- muestran que, en 2020, el 99,5% de la capacidad renovable instalada actualmente pertenece a grandes empresas privadas, es decir, que sólo hay un 0,05% de participación ciudadana, "por ello, hacemos un llamamiento a asegurar la democratización de la energía con medidas claras de descentralización. La ciudadanía tiene que dejar de ser considerada un actor pasivo en calidad de consumidora para convertirse en un agente activo. Lo marcan las directivas europeas y lo demanda la ciudadanía. Mientras las grandes empresas se benefician de la transición energética se está desaprovechando el enorme potencial de la energía comunitaria para generar energía limpia y cercana, y crear empleo".
Amigos de la Tierra destaca las más graves carencias del nuevo texto legal
El Artículo 11 abre las puertas al uso del gas en todo el sector transporte, un sector que debe ser descarbonizado urgentemente siguiendo principios de reducción de demanda, colectivización y electrificación. Según esta oenegé, la Ley debe impulsar una descarbonización total de la economía, "y el uso de combustibles como el gas debe estar muy restringido a sectores industriales de difícil reconversión".
Cristina Alonso Saavedra: “por último, la emergencia climática va más allá de una mera transición energética y objetivos de reducción expresados en números. Sectores como el agrícola o el de residuos, entre otros, son fundamentales en la lucha contra la emergencia climática. Son necesarias políticas sectoriales que estén en coherencia y que den respuestas a las causas de la crisis en la que nos encontramos. Además, llevarlas a cabo desde una perspectiva de justicia climática, asumiendo la responsabilidad histórica por parte de los países del Norte global y con una base de justicia social, ecológica y de género para que efectivamente nadie se quede atrás”
