Concretamente, el plan propone subsidiar la diferencia de costo entre una unidad convencional y otra eléctrica. En declaraciones que publica la página de presidencia del país, el director nacional de Energía, Rubén García, explicó algunas particularidades.
Un punto importante ha sido la implementación de un programa piloto en mayo de 2016, cuando se puso en circulación un autobús de servicio público completamente eléctrico. De los resultados del análisis de su performance, García dijo que "permiten demostrar el ahorro energético que implica este emprendimiento", por lo que el subsidio viene a impulsar "una segunda fase destinada ya a la masificación" de ese tipo de transporte.
Respecto a los valores por unidad, desde el MIEM se estima que ronda entre los 400 y los 450 mil dólares. "Por ejemplo -aseguró García-, Montevideo tiene un tipo unidad de transporte público que es bastante diferente a lo que puede ser una ciudad del interior; la unidad, el costo también puede ser diferente".
Según se asegura, esas unidades, que tienen una vida útil de al menos 14 años, permiten que por cada kilómetro recorrido se consiga un costo ocho veces menor, por lo que la inversión puede recuperarse en un periodo menor a 7 años.
Un punto importante es la incidencia que tiene la actual estructura de la matriz energética, cuya capacidad instalada eólica supera los 1.500 MW. Se trata de "trasladar el beneficio de la matriz nueva energética que tenemos en el país hacia una matriz nueva de transporte", afirmó el director nacional de Energía. De acuerdo con los datos suministrados, la matriz energética del país depende en un 37 % del petróleo y derivados; a su vez, el 60 % de ese porcentaje se destina a transporte.