Según Ray Shemanski, que lidera la sociedad conjunta puesta en marcha entre Johnson Controls y Saft, “estamos deseando reforzar nuestra colaboración tanto con Azure como con Ford para avanzar en el desarrollo de este tipo de tecnologías de última generación". Shemanski ha asegurado además que "este trabajo conjunto viene respaldado por una inversión de más de 600 millones de dólares que vamos a dedicar a la fabricación y creación de infraestructuras”. Según datos de Johnson Controls-Saft, el transporte comercial en entorno urbano supone el 12% del total de kilómetros que se recorren y es el responsable del 25% de las emisiones de gases de efecto invernadero que se producen.
Por su parte, Curt Huston, jefe de operaciones de Azure Dynamics, ha señalado que “hemos trabajado con Johnson Controls-Saft en el desarrollo de nuestro vehículo Balance™ Hybrid Electric,y en el proyecto del autobús lanzadera, y está probado que sus baterías ofrecen un diseño ligero y potente con una vida operativa larga, que supera a la mayoría de tecnologías de acumuladores existentes”. El sistema de baterías desarrollado por Johnson Controls-Saft, que incluye componentes electrónicos, eléctricos y mecánicos, se montará en las plantas de fabricación de Holanda MI. Azure Dynamics, que tiene su sede en Detroit, no ha anunciado aún dónde fabricará los vehículos eléctricos.
Además de su trabajo con Azure, Johnson Controls-Saft está actualmente en fase de producción del híbrido Mercedes S-Class, actualmente en venta en Europa y Estados Unidos y asegura que también proveerá baterías híbridas de litio-ión para el BMW 7-Series ActiveHybrid, disponibles en 2010, y para el primer vehículo eléctrico híbrido de tecnología plug-in de Ford que saldrá al mercado en 2012. Los vehículos eléctricos de transporte público (usarán la misma tecnología de baterías que está instalada actualmente en la flota de prueba Escape de Ford de vehículos híbridos eléctricos plug-in, también suministradas por Johnson Controls-Saft.
Johnson Controls-Saft es una compañía formada por Johnson Controls, que se define como "proveedor líder de baterías para automóviles y con una amplia experiencia en soluciones de sistemas para el sector", y Grupo Saft, distribuidor de soluciones avanzadas de almacenaje de energía a través de las baterías de litio. Saft, que está presente en dieciocho países y emplea unas 4.000 personas en todo el mundo, presume de ser, por su parte, "el primer fabricante mundial de baterías industriales de níquel-cadmio y de baterías primarias de litio para múltiples mercados".
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