En 2022, la Comisión Europea tendrá que proponer también objetivos post-2030 alineados con el Acuerdo Climático de París. Además, el Parlamento Europeo ha conseguido poner como objetivo un 2% de ventas de vehículos de cero y bajas emisiones a partir de 2025 para incentivar a las empresas a invertir en alternativas a los camiones de diésel altamente contaminantes.
Todo ello se ha logrado gracias a la presión del Parlamento Europeo, según destacan desde EQUO. Florent Marcellesi, eurodiputado de este partido en el grupo Verdes/ALE, comenta: "Para proteger nuestra salud y cumplir nuestros compromisos climáticos es clave reducir drásticamente la contaminación del sector del transporte. Es un gran éxito que la UE vaya a actuar por primera vez ante las emisiones de CO2 de los vehículos pesados".
El eurodiputado destaca, además, que "la regulación acordada es más ambiciosa que la original propuesta por la Comisión Europea. El futuro de los camiones más limpios llegará de la mano de la innovación y por eso era vital incluir incentivos a la producción de vehículos de bajas y cero emisiones y estimular a la industria para que apueste por el cambio y los avances tecnológicos. Lo hemos conseguido".
Marcellesi califica de "vergonzoso que algunos gobiernos todavía pongan los intereses de sus industrias automovilísticas por encima de los intereses de las personas". Señala, en especial, a Alemania y algunos países centroeuropeos "que bloquearon objetivos más ambiciosos".
Otro aspecto destacado por el eurodiputado de EQUO es la creación de empleo, duradero, que puede venir de la mano de motores más limpios.
"Es el momento de que los países de la UE pongan freno a su apoyo cortoplacista a los motores de combustión y fomenten el desarrollo de alternativas más verdes que a la larga beneficiarán también a la industria", concluye.