A medida que el parque de vehículos eléctricos crece, también lo hace el mercado de segunda mano. La valoración estandarizada de componentes y más concretamente de las baterías es clave para el desarrollo y estabilidad de este sector. Sin embargo, la falta de información fiable sobre el estado real de una batería dificulta su correcta valoración, y esto afecta tanto a los compradores y vendedores de VE de segunda mano como a los centros de reparación (CAT (Centros Autorizados de Tratamiento de vehículos) y empresas de reciclaje de baterías.
En este contexto, la posibilidad de contar con herramientas tecnológicas que permitan ofrecer un valor orientativo de la batería fue manera fiable resulta de gran ayuda. Esto es lo que ofrece la empresa TERA: una herramienta que ayuda a aportar más transparencia al sector y contribuye a la estandarización de los criterios de valoración.
David Santiago, fundador y CEO de la empresa alicantina, explica que han desarrollado la herramienta “mediante algoritmos avanzados basados en tipo de vehículo electrificado, fecha de fabricación, química o modelo de batería, entre otras variables, para calcular y ofrecer al instante un precio estimado de referencia".
La calculadora de precios de estas baterías está disponible en la página web de la empresa, y se puede acceder a ella cumplimentando un cuestionario. TERA también recoge baterías de vehículos eléctricos que están fuera de circulación y promueve la economía circular recogiendo baterías de vehículos eléctricos que están fuera de circulación.