Con Bici, Ecologistas en Acción, Amigos de la Tierra, Coordinadora Andando, Greenpeace, Madres por el Clima y Juventud por el Clima-Fridays for Future España han difundido hoy un comunicado conjunto en el que defienden que la bicicleta debe ser "un elemento estratégico en la movilidad durante la desescalada, porque no produce atascos, contaminación ni gases de efecto invernadero, permite mantener la distancia interpersonal y propicia beneficios para la salud: pedalear con regularidad -señalan- reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares, derrames cerebrales, ciertos tipos de cáncer o diabetes y de sufrir hipertensión, y otras enfermedades". Por estas y otras razones -explican desde la Coordinadora en Defensa de la Bici (ConBici), muchas ciudades en el mundo han comenzado a realizar planes de emergencia para fomentar los desplazamientos en bicicleta. París es buen ejemplo. La ciudad del Sena -informa ConBici- pondrá en marcha más de mil kilómetros de nuevas vías ciclistas, "entre las que destacan los 50 kilómetros de supervías ciclistas". Bogotá, con 45 kilómetros de vías ciclistas de emergencia; Milán, con 35; o Londres, con un ambicioso plan peatonal y ciclista, son otros ejemplos.
En España, la Coordinadora en Defensa de la Bici destaca también algunas ciudades. Estas: Barcelona y su área metropolitana, con 21 kilómetros de carriles bici; Logroño, con su plan Logroño Calles Abiertas; Valladolid, con el plan de transición a una nueva movilidad. Sin embargo -lamentan desde ConBici-, las medidas de emergencia "se adivinan todavía tímidas a nivel general, e insuficientes para que la bici tenga una representatividad real en el reparto modal de transporte".
Mayor aún es la preocupación que expresan desde la Coordinadora respecto del hecho de que la mayoría de las ciudades no cuentan aún "con ningún tipo de plan para mejorar ni la movilidad ciclista ni peatonal o garantizar un transporte público de calidad durante la desescalada". En estas ciudades -alertan- "es muy probable un aumento del tráfico rodado sin precedentes".
A escala local
Los defensores de la bicicleta consideran que es en el nivel local donde se deben poner en marcha la mayoría de las medidas, como vías ciclistas específicas y calles residenciales con prioridad peatonal y ciclista que cubran toda la ciudad o reducir la velocidad urbana a 30 kilómetros por hora, además de instalar aparcamientos para bicicletas seguros en puntos estratégicos. ConBici y las oenegés ecologistas señalan al urbanismo táctico, que consiste en modificaciones con señalización provisional, pintura, bancos o jardineras, como una de las claves para acelerar los cambios. “Se debe además facilitar la intermodalidad -apuntan-, permitiendo viajar con bicicleta en el transporte público y poner en marcha programas de formación para circular en bicicleta con seguridad, dedicado sobre todo a personas con poca experiencia”.
A escala nacional
Los defensores de la bicicleta consideran así mismo “fundamental” el apoyo del Gobierno central, “que debe aportar financiación específica a los ayuntamientos para medidas de movilidad de emergencia que potencien la bicicleta”. Mientras el Gobierno británico dispone de 250 millones de libras para infraestructuras peatonales y ciclistas de emergencia o el francés ha asegurado 60 millones de euros para ayudas ciclistas, el gobierno de España -lamentan- ha limitado su apoyo a dar “recomendaciones a la movilidad ciclista”. En cambio -denuncian-, sí se ha asegurado un apoyo prioritario a la industria del automóvil, “lo que una vez más se traduce en apostar por los medios de transporte más insostenibles”.
Por último, las asociaciones ciclistas y ecologistas insisten en que la movilidad ciclista será crucial en los próximos meses, “pero no se puede descuidar el espacio peatonal, que deberá ampliarse para garantizar la distancia interpersonal; es además imprescindible dotar al transporte público de los medios necesarios para ofrecer un servicio de calidad y con garantías de seguridad, porque -señalan en ConBici- tenemos que recuperar el espacio público para la sostenibilidad de la vida y no solo para circular deprisa”.
Para visibilizar todas estas denuncias y propuestas, ConBici convoca la acción Cadena Ciclista en varias ciudades, “precisamente para demandar más espacio y protagonismo de este medio en el sistema de movilidad”.
El objetivo de la Cadena Ciclista es "visibilizar la bicicleta como un medio de movilidad preferente durante Covid19, ya que la bici permite respetar los 2 metros de seguridad física entre personas, es un medio no contaminante y es una forma saludable de desplazarse por la ciudad que necesita un espacio seguro para circular".
La Cadena Ciclista -explican desde ConBici- se forma por pequeños grupos de 10–15 personas, con el objetivo de facilitar el control de las distancias (debe existir una distancia física de 2-3 metros entre los participantes.
Los convocantes recomiendan llevar mascarillas por si es necesario aproximarse en algún momento puntual a menos de 2 metros (como sabéis en ese caso es obligatorio), pero lo fundamental es respetar la distancia de seguridad.
La acción consiste en la "ocupación de un carril de una calle" durante 15 minutos. Pasado ese tiempo, cada grupo seguirá circulando por la calle en que se encuentra respetando siempre la distancia de seguridad de 2-3 metros entre participantes y evitando las aglomeraciones.
Aquí está el mapa de ciudades en las que se va a realizar la acción. ConBici invita a todo el mundo a inscribir su convocatoria.