La compañía estadounidense, que lleva en Almussafes (Valencia) más de 44 años, ha anunciado que invertirá 42 millones de euros en la planta valenciana para la instalación de la fábrica de baterías y la producción de los dos nuevos modelos híbridos. El president de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha calificado de "extraordinariamente positivo" que la planta valenciana se convierta en la factoría que más modelos de automóvil híbrido produzca en el continente y ha añadido que la decisión de la empresa "nos da confianza en la estabilidad del empleo y, sobre todo, de la continuidad de la empresa".
Al respecto de la fábrica valenciana, el president ha recordado el compromiso que, "históricamente", ha tenido la Generalitat con una industria que "ha generado un clúster y que es fundamental para el desarrollo económico y social de nuestra tierra". En este sentido, y en cuanto a la transición tecnológica del sector, Puig ha reafirmado el compromiso de colaboración del Consell con la industria del automóvil en su camino hacia "una transición justa" que, como ha asegurado, no debe dejar "a nadie al margen". Por ello, el president ha asegurado que el Gobierno valenciano defenderá esta posición "en el Gobierno de España y ante la Unión Europea".
Ford producirá en su factoría de Almussafes los modelos híbridos de sus monovolúmenes S-Max y Galaxy, que se suman a las líneas de producción de las versiones híbridas de los Mondeo y Kuga. Además, estos vehículos serán suministrados por la nueva planta de ensamblaje de baterías que comenzará a funcionar en septiembre. La compañía invertirá 42 millones de euros en la planta valenciana para la instalación de la fábrica de baterías y la producción de los dos nuevos modelos híbridos, con el objetivo de impulsar la estrategia de electrificación en el continente Europeo.