La EVS30 tuvo lugar del 9 al 11 de octubre y ha reunido a 353 expositores y miles de visitantes. En la cuna del poderío automovilístico alemán ha llamado la atención que más de un tercio de esos participantes han venido de fuera. Un 26% eran ingenieros, un 23% trabajaban en el sector de la ingeniería eléctrica y electrónica, un 19% eran proveedores de soluciones de movilidad, un 18% de ingeniería automotriz, maquinaria de construcción y vehículos especiales, y un 17% del campo de las baterías y otros sistemas de almacenamiento. También ha habido muchos participantes del sector de la generación energética, y las renovables.
40 tipos de vehículos han servido para cmpletar 750 pruebas. Que han puesto en evidencia la madurez de la tecnología, la mejora constante de la capacidad de almacenamiento de las baterías, y la carga inteligente, que permite tiempos de carga extremadamente cortos. La industria está de acuerdo: ¡ha llegado el momento!
En la llamada Declaración de Stuttgart, la Asociación Europea de la Movilidad Eléctrica (AVERE) insiste en que “la industrialización y la producción en masa del vehículo eléctrico y de todo el ecosistema de componentes y servicios que lo rodea está en marcha”.
En torno al EVS30 se celebraron otros eventos paralelos, como f-cell y Battery + Storage, centrados en fuentes de almacenamiento estacionario, pilas de combustible y el hidrógeno como uno de los principales medios de almacenamiento a gran escala en el cambio de modelo energético.
El éxito de Stuttgart ha propiciado que organizadores y expositores hayan decidido mantener en la ciudad alemana una feria sobre movilidad eléctrica que se celebrará del 8 al 10 de octubre de 2018.